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"Ha fallecido por una respetable decisión personal": la dura realidad sobre la muerte de Dwamena

Antonio Asso, cardiólogo del futbolista fallecido la semana pasada, ha compartido una carta abierta para el ‘Heraldo de Aragón’ en la que ha confesado que "si no se hubiese explantado el desfibrilador seguiría vivo"

Raphael Dwamena en el banquillo de Mestalla con la camiseta del Levante en la temporada 2018-2019 de LaLiga / MB Media

Raphael Dwamena en el banquillo de Mestalla con la camiseta del Levante en la temporada 2018-2019 de LaLiga

El mundo del fútbol sigue de luto. El pasado sábado, 11 de noviembre, Raphael Dwamena, exjugador de Levante y Zaragoza, entre otros clubes, falleció el pleno partido a su temprana edad de 28 años. El futbolista que militaba en el KF Egnatia de Albania, se desplomó sobre el terreno de juego en el 24' y fue atendido por los servicios de emergencia. De forma inmediata, Dwamena fue transladado al hospital donde finalmente terminó falleciendo.

Antonio Asso, quien fuera su cardiólogo durante su etapa en La Romareda y médico del Servicio de Cardiología del hospital Miguel Servet y del Instituto de Arritmias de Quirónsalud en Zaragoza, le aconsejó en su momento que se retirase del mundo del fútbol. Al conocer la negativa del jugador, le obligó a ponerse un desfribilador para asegurar su vida: "Logramos convencerle de la necesidad de implantarle un desfibrilador para al menos garantizarle la vida, a la par que desaconsejamos la práctica profesional deportiva. Insistí en que según fuera evolucionando la enfermedad, en algún momento podríamos abordar el origen de la arritmia mediante alguna intervención de ablación, pero eso requería que se mantuviera vivo, y para ello era imprescindible el desfibrilador".

"Su decisión era irrevocable y ponía toda su responsabilidad en sí mismo y en la voluntad del Dios en el que creía"

Tras su salida del equipo aragonés, Asso siguió en contacto con Dwamena: “Estaba empeñado en seguir su carrera profesional por encima de todo y acabé perdiendo la esperanza de influir en él”. Tras no seguir sus recomendaciones, el cardiólogo y el futbolista perdieron el contacto. Asso se enteró a través de la prensa que Dwanema prescindió del desfibrilador en 2022 a los tres años de implantarselo: "Hace un par de años me comunicaron que el desfibrilador le había salvado la vida al presentar una arritmia maligna que había sido correctamente tratada de forma automática por el dispositivo. Posteriormente perdimos el contacto. Hace un año supe por la prensa que había solicitado la retirada del desfibrilador implantado por nosotros y que finalmente se le había explantado en Suiza, creo. Era ya tarde, su decisión era irrevocable y ponía toda su responsabilidad en sí mismo y en la voluntad del Dios en el que creía. Desde ese momento fui consciente de que un día sucedería la tragedia".

Su cardiólogo hizo todo lo posible por salvar la vida de Raphael Dwamena. Tras su fallecimiento ha querido lanzar un mensaje que llegue a la conciencia de la gente: “Ha fallecido como consecuencia de una respetable decisión personal, pero si no se hubiese explantado el desfibrilador Raphael seguiría vivo. Es el final de una triste y previsible historia. A veces las noticias son confusas, y conviene aclarar para los miles de pacientes que llevan un desfibrilador y confían en la seguridad que aporta, que no ha fallecido alguien que llevaba un desfibrilador, sino alguien que no lo llevaba”.

Antonio Asso acompañó en gran parte de su carrera a Dwamena. En su carta despedida, Asso ha querido terminar con unas bonitas palabras que muestran la estrecha relación que existía entre el cardiólogo y el jugador: “Un gran chico, noble y de mirada limpia, sin aires de estrella”.

Raphael Dwamena era un viejo conocido en LaLiga. En su etapa en el fútbol español, se le instaló un desfibrilador debido a unos problemas caridacos. En el año 2021, estuvo inactivo en el mundo del fútbol por sus problemas con la arritmia. Posteriormente, cuando militaba en el BW Linz austriaco, cayó desplomado en pleno partido de la Copa de Austria. Esa experiencia fue un preámbulo de la fatalidad que la vida le tenía preparado al joven futbolista.

En su etapa en La Romareda en la 19/20, Dwamena sufrió un episodio parecido al que vivió en 2021. Se le detectaron problemas de corazón y se pasó gran parte de la temporada sin poder pisar el césped. El atacante vistió la camiseta granota en 15 partidos. Los colores del equipo maño los defendió en nueve encuentros. Ambos clubes de LaLiga Hypermotion mostaron en sus rede sociales sus condolencias por su pérdida.

Dwamena también fue internacional con Ghana en ocho ocasiones. Su selección también escribió una carta de despedida al que fuera su jugador: "Nuestros pensamientos están con la familia de Raphael Dwamena en este momento difícil. Raphael representó a Ghana de todo corazón. Siempre lo extrañaremos por su dedicación a la selección nacional. ¡Descansa en paz Rafael!".

La opinión de Manu Carreño

 
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