Raquel Martí, directora del Comité de UNRWA España: "Por la situación en Gaza, hemos tenido que calcular las calorías mínimas que una persona necesita al día para sobrevivir"

Raquel Martí, directora del comité en España de la agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina, ha pasado por los micrófonos de Hora 25 con Aida Bao para explicar cuál es la situación actual en la franja de Gaza, a la espera de un previsible ataque terrestre de Israel y tras el anuncio del Gobierno de Netanyahu de que ha reabierto parcialmente el suministro de agua con la franja.

Sobre el ataque terrestre -que Israel ha confirmado que se va a producir-, Martí asegura que desde la agencia "no manejamos ningún plazo" y que "lo que estamos pidiendo es un alto el fuego inmediato para poder abrir pasillos humanitarios, corredores seguros, para poder entrar ayuda humanitaria".

Una ayuda humanitaria que cada minuto que pasa se hace más necesaria: "acabamos de anunciar que nos estamos quedando sin agua, sin comida y sin medicamentos. De hecho, hemos empezado a racionar el agua. A nuestros refugios únicamente les estamos pudiendo dar un litro de agua a cada uno para todo un día". Y no solo con el agua: "hemos tenido que hacer un cálculo exhaustivo de las calorías mínimas que una persona necesita al día para sobrevivir para poder estirar al máximo la comida que nos queda , puesto que desde el día 7 que comenzó la escalada militar no ha entrado nada".

Preguntada sobre cuánto tiempo puede aguantar la población sin que entren suministros, Raquel Martí asegura que "muy poco": "Ya están se están cerrando las panaderías, las últimas se quedaban abiertas por falta de electricidad y de harina. No hay supermercados, la mayor parte de los establecimientos -debido a los bombardeos- están cerrados".

Y la situación en las viviendas es trágica porque "muchísimas personas en sus casas no tienen ya ni alimentos ni agua y a las agencias de Naciones Unidas les queda para escasos días".

Sobre el anuncio de Israel de que reabría una de las tres tuberías que llevan agua desde el país hebreo hasta la franja, asegura Martí que"no tenemos constancia". "Lo que sí podemos decir es que muchísimas redes de distribución de agua han sido dañadas por los bombardeos y, por otro lado, evidentemente sin electricidad no se puede bombear el agua hasta los hogares. Con lo cual, aunque Israel abriera ahora mismo ese suministro, seguiría habiendo muchísimos problemas para poder abastecer a la población. En cualquier caso ojalá lo abra y al menos haya algunos puntos en los que la población pueda abastecerse".

"Hay un millón de personas desplazadas a lo largo de toda la franja de Gaza y, de ese millón, la mitad se encuentran en nuestras escuelas a lo largo de toda la franja", explica Martí sobre los refugiados. "En el sur tenemos aproximadamente unas 375.000 personas".

Pero es que "hay muchísimas personas que no quieren abandonar sus hogares porque lo que dicen es 'si vamos a morir, mejor a hacerlo en casa'. Otros simplemente es porque no pueden hacerlo, porque los bombardeos son de tal intensidad que les resulta imposible salir de sus casas. O, incluso, si lo pudieran hacer, no tienen medios de transporte para poder desplazarse", asegura la directora del comité en España de la agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina.

"Muchas familias están acogidas en una misma casa. Puede haber familias hasta de 70 miembros en una casa con bebés, con ancianos, con niños... No tienen medio de transporte ni tienen manera de poder salir de la del norte de la Franja de Gaza. Esto se va a convertir en una catástrofe humanitaria sin precedentes en un cortísimo espacio de tiempo. Nunca nos habíamos enfrentado, en 75 años que llevamos trabajando en la zona con los refugiados de Palestina, a una situación así", asegura Martí en los micrófonos de la SER.