Jessica Chastain: "Hay un sexismo intrínseco en Estados Unidos y en el cine americano"

San Sebastián

La actriz Jessica Chastain es una de las pocas estrellas que ha pisado los festivales internacionales este inicio de temporada. La huelga de actores y actrices no permite promoción, ni alfombras rojas, ni ruedas de prensa, ni entrevistas, además de la paralización de rodajes y otros eventos. Sin embargo, la ganadora del Oscar por Tammy Fey, película con la que también ganó en San Sebastián la Concha de Oro, ha obtenido un permiso de su sindicato para poder promocionar Memory, la última película del cineasta mexicano Michel Franco.

"Creo que es un sexismo intrínseco en los Estados Unidos que, en realidad, es bastante fuerte y difícil de erradicar. Pero lo estamos haciendo, espero que lo logremos", decía la actriz en una entrevista en la Cadena SER antes de la alfombra roja previa a la proyección de esta película, donde comparte cartel con el actor Peter Sarsgaard. En Memory interpreta a una mujer, una trabajadora social que sobrelleva el peso traumático de la adicción al alcohol y el abuso sexual. La de Franco es una historia luminosa a pesar de la tragedia de los personajes, ella con un trauma familiar a sus espaldas, él con una demencia que hace que no recuerde nada.

"Cuando leí el guion, al principio pensé: Oh, ya sé a dónde va esto, va a ser una película de venganza. Y, al revés, estaba totalmente desprovisto de cualquier cliché que pudiera haber imaginado. Y lo mismo con la siguiente película que hemos hecho", dice sobre Memory, una película indaga en la violencia contra las mujeres, un tema presente en el festival y que ha ido entrando en el cine tras el Me Too. Sin duda, el trabajo de la actriz y el de su compañero de reparto que ganó la Copa Volpi en Venecia, Peter Sarsgaard, uno de los puntales de esta película que nos lleva a preguntarnos qué es la identidad sin memoria o sin recuerdo y si es posible el amor cuando no se puede recordar. "La química entre los dos hubiera sido imposible sin la dirección de Michel Franco", añadía.

La actriz acudió a Venecia, donde la película competía en sección oficial, y ahora a San Sebastián donde se presenta en la sección perlas. Ataviada con su camiseta del sindicato, haciendo hincapié en las reclamaciones. Así lo ha vuelto a hacer en Donosti, donde explicaba, en una entrevista en la Cadena SER, que espera que la huelga se acabe pronto, porque eso significará que hay cosas que pueden cambiar.

"Espero que también con los actores y actrices la patronal, la AMPTP, vuelva a sentarse a negociar, como ha hecho con los guionistas. Llevamos desde el 12 de julio pidiendo que se sienten a negociar y, de momento, no han aparecido. Sé que hay gente que quiere hacerlo bien en estas empresas y que trabajarán para que haya un acuerdo justo. No solamente el sindicato de actores está luchando por los derechos laborales, también sindicatos de otras categorías laborales", decía la actriz que también es productora. "Para la próxima película que haremos juntos", decía refiriéndose al rodaje que emprenderá de nuevo con el director mexicano. "Hemos llegado a un acuerdo sindical con 50 técnicos y también con los actores. Hemos hecho contratos justos, porque hay mucha gente que está sufriendo las consecuencias laborales de esta situación", añadía Chastain.

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Hay muchos miembros de SAG-AFTRA que luchan por ganar un salario digno. El 87% de mi sindicato no gana los 26.000 al año para recibir un seguro de salud. Los actores demandan una mejora de las condiciones económicas y la exigencia de transparencia a las plataformas a la hora de informar de sus audiencias y derechos de imagen. Además, quieren regular el uso de la inteligencia artificial y la digitalización de su imagen, uno de los puntos más complicados de la negociación y que más preocupa al sector.

La actriz que empezó en el cine independiente y en el teatro, dice que es el mejor lugar para trabajar, a pesar de haber estado en grandes producciones. Por eso, trabajar con Michel Franco ha sido como hacerlo en un remanso de paz. "Me han dicho demasiadas veces que a veces opino demasiado, que hablo demasiado de cosas políticas, que hablo de la huelga... Cuando te dicen algo así, si tienes una autoestima baja y poca confianza, pueden intimidarte y crearte inseguridad", insistía la actriz.

Explica que en Estados Unidos el clima laboral es mucho más competitivo y asfixiante. "Prefiero el cine independiente. Me parece más interesante para contar historias de mujeres. Creo que Estados Unidos puede ser bastante sexista, especialmente en lo que respecta al cine. Estamos intentando cambiar eso", incidía Chastain que para ella es más fácil buscar historias fuera de su país. "Busco historias en otros lugares. Me gusta el cine europeo, mi actriz favorita es Isabelle Huppert", dice.

Chastain se deshace en elogios hacia el director mexicano, que ha firmado películas como Las hijas de abril, Nuevo Orden o Chronic. "Lo maravilloso de conocer a Michel y trabajar con él es que siento que es alguien que me respeta como actriz, pero también como persona. Valora mis opiniones y mi trabajo. La relación de colaboración que tenemos, es más que hacer esta película o que venir a San Sebastián a explicar nuestro proyecto. Para mí, él y Terrence Malick son los directores más importantes de mi carrera hasta ahora, porque siento que me ven de una manera en que ni yo misma me veo".