Red Bull Racing sigue dominando en Fórmula 1: sexto mundial de constructores, el segundo consecutivo

Red Bull Racing, el equipo de Max Vertsappen y Checo Pérez en Fórmula 1, agranda su leyenda en la categoría consiguiendo el sexto mundial de constructores de su historia. Lo hace seis carreras antes del fin de temporada, tras el GP de Japón, y subidos a hombros de la dominación absoluta de Max Verstappen en esta temporada. Por puras matemáticas, ningún equipo podría superarles ya hasta el final de año. Red Bull atesora 303 puntos sobre el segundo, Mercedes, en una de sus temporadas más intratables con 15 victorias en 16 carreras.

El RB-19, el monoplaza desarrollado para este campeonato, atesora ya 15 victorias, 23 podios y 11 poles. La mayor parte de ellas han llegado de las manos de un Max Verstappen que vive su mejor momento en la F1 y que, por estado de forma y monoplaza, no tiene un rival directo en la categoría. El neerlandés lidera también el mundial de pilotos con 177 puntos de ventaja sobre su compañero Checo Pérez, y, a falta de sorpresas, también será campeón del mundo por tercer año consecutivo en la carrera al sprint de Qatar. Se convertiría además en el primer campeón del mundo en ser proclamado como tal un sábado de gran premio.

Así ha hablado Verstappen tras la carrera sobre la victoria y el título para un equipo que lo ha modelado hasta convertirlo en el campeón que es hoy. "Tan sólo ha estado ajustado en la salida, pero después he podido hacer mi carrera y éramos claramente más rápidos que los demás". El neerlandés ha comentado que ganar el título en Japón con un motor Honda es "el escenario perfecto". Precisamente sobre el trazado de Suzuka y con un final algo anticlimático por la cantidad de puntos repartidos, Verstappen se llevó el título de pilotos en 2022.

"Intentaremos hacerlo, sería genial, pero me preocuparé de ello cuando lleguemos", ha terminado el campeón al ser preguntado por la posbilidad de ganar el título el próximo sábado en la carrera al sprint del GP de Qatar. pOr su parte, Paul Monaghan, ingerion jefe de Red Bull, ha asegurado que "ganar un mundial de equipos es excepcionalmente difícil", pero que tienen "la suerte de tener un coche rápido, un gran equipo y dos buenos pilotos". De Checo Pérez, que tuvo que retirarse de la carrera tras estar involucrado en dos accidentes, dijo que había "tenido un mal día", pero que el otro piloto, Verstappen, "había cumplido a la perfección".

Monaghan ha queiro destacar la dureza de ganar este título y los momentos de estrés que ha tenido que superar el equipo, a pesar de que las tablas de puntos parecen indicar que su temporada ha sido bastante tranquila: "Ha sido una batalla de equipos, hemos aguantado y esta es la recompensa". Sobre las dudas que se levantaron tras el GP de Singapur y que apuntaban a que Red Bull podría haber sido perjudicado por la nueva normativa de elementos flexibles, el ingeniero bromea: "Yo nunca he tenido dudas, ¿tú si? Porque yo no. Estoy contento porque no ha tenido ningún efecto ni en Singapur ni aquí".

Por encima de todo, tanto Verstappen como Monaghan aseguran que no van "a levantar el pie" ni a "esperar por nadie" en las seis carreras que quedan. Toca sentarse y ponerse cómodo, porque la era Red Bull de la F1 sólo acaba de empezar.