Terror y 'violencia desgarradora' en Yenín: "Es el momento de que la comunidad internacional haga algo"

El consejero israelí Nadav Tamir aboga por una solución política de “dos Estados” entre Israel y Palestina ante la mayor oleada de ataques en dos décadas

Infierno en Yenín

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P. Morán Pablo_Moran

L. Riera LuciaRBC

Cadena SER07/07/2023 - 22:37 UTC

Israel llevó a cabo esta semana una operación inédita en Yenín. Con bombardeos aéreos y el despliegue de cientos de soldados, es la mayor escalada de la violencia en Cisjordania desde la segunda Intifada hace dos décadas. En ese campo de refugiados palestinos trabaja como especialista de Urgencias de Médicos Sin Fronteras el doctor Pedro Serrano. El sábado de madrugada recibieron una llamada del equipo de seguridad avisándoles del ataque. Recogieron sus cosas y se fueron al hospital, de donde no salieron en dos días.

“Estuvimos casi 48 horas sin parar, recibiendo una cantidad de casos gravísimos, casos desgarradores, heridas de bala en la cabeza, abdomen, extremidades, fracturas expuestas...”, recuerda. El doctor, que ha estado dos veces en Irak y cuando los talibanes tomaron Afganistán, asegura que “no había visto antes algo tan violento ni tan agresivo, tan visualmente gráfico”.

Los ataques llegaron al interior de los hospitales. “Nos lanzaron un tipo de misil que tira varias bombas de gas lacrimógeno y salen volando hacia todas direcciones. Una cayó frente a nuestro hospital y otras nos las tiraron dentro de la sala de urgencias y nos vimos obligados a evacuar pacientes”, relata Serrano.

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Cuando al fin pudieron volver a sus casas, encontraron calles destruidas, barricadas y edificios derruidos o incendiados. Además de la pérdida de sus viviendas, la población se ha enfrentado al terror que provoca una redada como esta. Es lo que más preocupa a los trabajadores humanitarios. Serrano explica que el miedo ha generado situaciones de caos dentro de los hospitales, con gente corriendo e intentando refugiarse. Además, dice, “había francotiradores disparando hacia el hospital”.

Ahora las principales necesidades son la asistencia a la población que ha perdido sus casas, la falta de electricidad y agua. Pero dentro del campo de refugiados todavía no han podido acceder para valorar la situación.

Con esta sangrienta operación militar, Israel manda un claro mensaje de que “trata de disuadir a los grupos terroristas dentro de Yenín, porque la Autoridad Palestina prácticamente perdió el control allí”, asegura el consejero israelí Nadav Tamir.

Tamir es responsable de asuntos internacionales en el Centro Peres para la Paz y la Innovación, una ONG en memoria del último fundador del Estado de Israel, presidente del país de 2007 a 2014, Simón Peres, de quien fue asesor principal. Cree que el objetivo de las fuerzas israelíes es “perseguir solo a los terroristas”, no a los civiles, pero reconoce que es difícil “cuando viven en un campo de refugiados”, e insiste en que “la solución a largo plazo tiene que ser política, no militar”.

Esta ha sido la operación militar más importante en Yenín en dos décadas. Pero la prensa mundial, los medios de comunicación, no han dedicado mucho tiempo a explicarlo. ¿Cuál es su opinión al respecto? ¿Cree que el mundo se olvida del pueblo palestino?

Sí, lamentablemente, creo que el mundo no presta mucha atención a la cuestión palestina. Y no solo sobre esta operación en Yenín, porque hay operaciones en muchos lugares del mundo, pero el hecho de que tengamos una ocupación desde hace 56 años que se suponía que iba a ser temporal y que el mundo no esté ayudando realmente a las partes a encontrar una solución que acabe con ella, creo que es malo para los israelíes y malo para los palestinos.

¿Cree que estamos más cerca de una tercera Intifada después de esto?

Es muy difícil de predecir. Por un lado, creo que el pueblo palestino está bastante cansado de las intifadas y también sienten que no les han dado mucho en el pasado. Por otro lado, el actual Gobierno israelí tiene tantos provocadores que presionan todos los botones y es muy difícil predecir qué pasará y quién prevalecerá, si las personas que entienden que las provocaciones no son buenas para la seguridad de Israel o los provocadores que tratan de complacer a sus bases siendo más agresivos con los palestinos.

Usted representa un centro que busca la paz en Oriente Medio. Pero parece que estamos en tiempos difíciles para eso, con el Gobierno israelí, con extremistas y con las autoridades palestinas que parece que no pueden controlar a su propia población. Por lo tanto, son tiempos difíciles para buscar la paz en Oriente Medio.

Sí. Por un lado, es un momento difícil, pero creo que en realidad podría convertirse en una oportunidad. Cuando hay dos Gobiernos que no pueden hacer nada bilateralmente, es el momento de que la comunidad internacional haga algo al respecto. Existe un consenso internacional a favor de la solución de dos estados, pero los países de Europa, los Estados Unidos y otros repiten los puntos de conversación, pero no actúan para promoverla. Y creo que la comunidad internacional debería hacer algo para recuperar la solución de dos estados y crear un horizonte político. Y eso también cambiará la dinámica en Israel y Palestina y garantizará que cuando los palestinos celebren elecciones y la próxima vez que los israelíes celebren elecciones, figure en la agenda una solución de dos estados, a diferencia de los años anteriores, en los que estuvo completamente ausente.

Sé que ve oportunidades en la situación actual dentro de Israel debido a las protestas en las calles contra el Gobierno. ¿Qué cree que está cambiando dentro de Israel?

Creo que la mayoría liberal que durante muchos años no fue activa políticamente y era en cierto modo indiferente a la política, ahora está despertando. Y este despertar podría convertirse en una gran oportunidad para cambiar el rumbo de nuestro país. Nuestro país carece de dos cosas que la mayoría de los países tienen, y son la constitución y las fronteras. Y creo que sólo un despertar de la mayoría liberal en Israel podría llevarnos a una situación en la que tengamos una constitución y unas fronteras que también ayuden a crear un estado palestino. Así que, en realidad, creo que es un momento de oportunidad, pero no solo se producirá desde dentro, también tendrá que contar con el apoyo de un impulso internacional.

¿Cuánto tiempo cree que podrá resistir Netanyahu con esta coalición con extremistas?

Es muy difícil de predecir en la política israelí, pero creo que este Gobierno no podrá mantenerse durante demasiado tiempo porque si sigue adelante con su agenda, llegará a una crisis constitucional y las manifestaciones solo crecerán y los problemas económicos crecerán y las presiones internacionales crecerán. Y si no lo impulsan, entonces el Gobierno se derrumbará desde dentro porque no podrá cumplir con los requisitos de los socios. Así que tanto si siguen adelante como si no, creo que este Gobierno no es muy sostenible.

¿Y qué piensa el Ejército de este Gobierno?

Bueno, ya sabes, la gente en uniforme no puede realmente decir lo que piensa, pero conozco a muchos de ellos y sé que sienten que este Gobierno es peligroso para la seguridad de Israel. Sienten que, en lugar de aportar calma e intentar impulsar una solución diplomática, solo empeoran las cosas. Y lo más problemático para los militares es que la autoridad sobre muchas cosas en Cisjordania pasó al control de Smotrich (Bezalel Smotrich-ministro de finanzas de Israel), que es un líder muy extremo. Y estoy seguro de que los militares están muy descontentos con esto.

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