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Resultado de las elecciones en Brasil 2022: ¿quién ha ganado los comicios y qué cabe esperar en la segunda vuelta?

El voto de los abstencionistas y del electorado de Simone Tebet y Ciro Gomes será clave en la segunda vuelta

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el líder del Partido de los Trabajadores, Lula da Silva

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el líder del Partido de los Trabajadores, Lula da Silva

Madrid

Luiz Inácio Lula da Silva y Jair Bolsonaro se enfrentarán en una segunda vuelta de las elecciones presidenciales, al no haber superado ninguno de los dos candidatos el 50% de los votos en la primera vuelta de los comicios, celebrada este domingo. Con el 97,07% de los votos escrutados, el líder del Partido de los Trabajadores ha sumado el 47,88% de las papeletas (más de 54,8 millones de votos), mientras que el actual presidente saliente y líder del Partido Liberal, ha obtenido el 43,68% (49,7 millones de electores).

La diferencia entre los dos principales candidatos se reduce a poco más de cuatro puntos porcentuales, tal y como indica el recuento de la práctica totalidad de las urnas. Después de que el también expresidente del país se hubiese situado por detrás de Bolsonaro durante la mitad del recuento, Lula ha conseguido adelantar a su rival. A pesar de ello, ambos se han quedado cerca del 50% necesario para evitar el balotaje.

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Los sondeos previos a las elecciones situaban a Lula muy por delante de su adversario, ya que pronosticaban, incluso, que ganaría la presidencia en la primera vuelta. "Todas las encuestas nos pusieron en el primer lugar y siempre pensé que íbamos a ganar. Y vamos a hacerlo. Esto es solo una prórroga", ha publicado Lula en un mensaje en Twitter. A este respecto, el expresidente cree que "nada pasa por casualidad" y manifiesta su deseo de volver a debatir con su rival: "Será la primera oportunidad de tener un debate cara a cara con el actual presidente, para que podamos hacer comparaciones entre el Brasil que él construyó y el Brasil que construimos nosotros", ha agregado.

En la segunda vuelta, serán claves los votos de los abstencionistas, así como la decisión de quienes en esta ocasión han apoyado a Simone Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño (4,22%), y a Ciro Gomes, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (3,06%). Este escenario se traduce en que Lula tendrá que granjearse los apoyos del centro-derecha si quiere vencer a Bolsonaro.

Bolsonaro ha destacado "las mentiras" de los institutos de los institutos de investigación, refiriéndose a las publicaciones de los sondeos de la empresa Datafolha, y ha mostrado la "confianza total" de obtener una victoria en segunda vuelta. "Entiendo que hay voluntad de cambio por parte de la población, pero hay ciertos cambios que pueden venir a peor", ha declarado, en palabras recogidas por el periódico 'O Globo'.

La cita electoral de este domingo ha sido histórica, entre otras muchas razones, porque ha sido la primera vez que se disputaban la presidencia un presidente en el cargo y un expresidente de Brasil. La polarización que atraviesa Brasil ha generado la mayor cristalización de votos desde 1989 y esto ha dado por descartadas alternativas como las de los candidatos Simone Tebet (Movimiento Democrático Brasileño) y Ciro Gomes (Partido Democrático Laborista).

Los primeros colegios electorales abrieron a las 8:00 horas (hora de Brasilia), cuando en la España peninsular eran las 13:00 horas. Las urnas han estado abiertas durante 9 horas, hasta las 17:00 horas, las 22:00 en España. Aunque haya diferencia horaria entre regiones, se toma como referencia la hora de Brasilia y todos los votantes acuden en simultáneo. El voto es obligatorio en Brasil para las personas de 18 años hasta los 69, opcional para los de 16 y 17 años, además de para los mayores de 69.

Así votaron Lula y Bolsonaro

El expresidente de Brasil y líder del Partido de los Trabajadores, Lula da Silva, votó en la Escuela Firmino Correia de Araújo, en Sao Bernardo do Campo, en Sao Paulo. "Hace cuatro años no pude votar porque fui víctima de una mentira... (Quiero) tratar de ayudar a mi país a volver a la normalidad", dijo a los medios tras depositar su voto en las urnas.

El presidente Jair Bolsonaro votó en un colegio electoral en la Villa Militar de Río de Janeiro, vestido con una camiseta deportiva amarilla con el cuello verde y la bandera nacional estampada en el pecho, y aparentemente, llevando un chaleco antibalas debajo.

Además, el actual líder brasileño afirmó que ganará en primera vuelta. "Estamos tranquilos en primera vuelta, se deciden hoy las elecciones", dijo Bolsonaro en breves declaraciones a los periodistas al salir del colegio electoral.

El presidente, Jair Bolsonaro, a su entrada en el colegio electoral

El presidente, Jair Bolsonaro, a su entrada en el colegio electoral / CARL DE SOUZA

El presidente, Jair Bolsonaro, a su entrada en el colegio electoral

El presidente, Jair Bolsonaro, a su entrada en el colegio electoral / CARL DE SOUZA

Los brasileños en España acuden a las urnas en medio de la polarización entre Lula y Bolsonaro

Las elecciones presidenciales brasileñas transcurrieron en España con normalidad y gran afluencia de votantes, que se manifestaron claramente divididos entre los partidarios de Bolsonaro y Lula da Silva. La jornada se desarrolló tranquila, con "mucha participación y mucho interés", explicó la cónsul general de Brasil en Madrid, Gisela Padovan. "Siempre hubo una buena participación, pero creo que este año, con tanta discusión política, parece que hay más gente", y es "muy importante para la democracia", agregó.

En torno a 31.000 brasileños estaban registrados para votar en España, 20.000 en Madrid y 11.000 en Barcelona; el sufragio es obligatorio y presencial, con urnas electrónicas, lo que permite el recuento automático y publicación inmediata del resultado tras concluir la votación.

La población brasileña en España es de 90.535 empadronados, según datos del Instituto Nacional de Estadística del 1 de enero de 2022. Los comicios son también legislativos federales y, además, se eligen los gobernadores y parlamentarios de los estados, pero desde el extranjero solo se puede votar al presidente de la República.

El cierre de campaña, momento clave

Este sábado, tanto Bolsonaro como Lula da Silva pusieron fin a la campaña electoral, pese a que en Brasil no existe la jornada de reflexión. Da Silva cerró la campaña recorriendo las calles de Augusta sobre una camioneta rodeado de sus seguidores y acompañado del candidato para gobernar el estado de Sao Paulo. En este acto no faltaron ni las banderas LGTB ni las de los sindicatos, así como las del propio Partido de los Trabajadores.

Bolsonaro, en cambio, cerró la campaña participando en una concentración en moto en la plaza Campo de Bagatelle, para después hacerse fotos con sus simpatizantes, también acompañado del candidato al gobierno del estado. Además, Bolsonaro, fiel a su estilo de recordar el pasado de Lula en prisión, donde estuvo desde 2018 hasta 2020, hasta que el Tribunal Supremo anulara sus condenas, ha llevado una bolsa con una imagen del expresidente izquierdista entre rejas. Esa bolsa ha servido para que sus fieles corearan: "¡Lula, ladrón, tu lugar es la prisión!".

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, paseándose ayer por las calles con una bolsa en la que se ve a Lula da Silva en prisión

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, paseándose ayer por las calles con una bolsa en la que se ve a Lula da Silva en prisión / ERNESTO BENAVIDES

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, paseándose ayer por las calles con una bolsa en la que se ve a Lula da Silva en prisión

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, paseándose ayer por las calles con una bolsa en la que se ve a Lula da Silva en prisión / ERNESTO BENAVIDES

Lula, claro favorito

Desde el inicio de la contienda, y pese a los esfuerzos de Bolsonaro por impedirlo, Lula se ha situado como claro favorito en las encuestas. Las últimas publicadas, le dan entre el 51% en intención de voto (según Ipec) y el 50% (según Datafolha). Estos porcentajes podrían hacer que el expresidente consiguiera hacerse con el Palacio del Planalto (sede de la Presidencia brasileña) en primera vuelta. De no conseguirlo, el tiempo hasta la segunda vuelta, que sería el 30 de octubre, daría pie a Bolsonaro para agudizar aún más el nivel de agresividad contra Lula y aumentar la confrontación entre ambos.

El agregador PollingData era algo menos optimista respecto al resultado de Lula, aunque también le daba como ganador, pero en segunda vuelta. En este primer turno, Lula obtendría el 43,6% de los votos, frente al 37% de Bolsonaro. En la segunda vuelta, el resultado sería del 50,9% para Lula y del 39,4% para Bolsonaro. De hecho, PollingData estima que esa segunda vuelta se dará con un 91% de posibilidad.

El apoyo a Lula se ha mantenido estable desde el principio de la campaña, no así el del presidente Jair Bolsonaro, que consiguió remontar en las encuestas y dejar un escenario aún más polarizado y con menos margen entre ambos candidatos.

Bolsonaro, "el Trump tropical"

Muchos expertos coinciden en comparar a Bolsonaro con el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Quizá sea por su gestión negacionista de la pandemia, por alentar la desinformación y las noticias falsas, o por poner en duda el sistema electoral brasileño.

Pero en las últimas horas, ha sido el propio Trump quien no solo ha respaldado a Bolsonaro, sino que le ha comparado con él. "El Trump tropical" que ha hecho "un gran trabajo por la maravillosa gente de Brasil", es lo que ha dicho el expresidente estadounidense.

Trump, a través de lo que ha publicado en su red social Truth Social, ha recordado que ningún otro líder internacional le llamaba tanto como él cuando estaba en la Casa Blanca. "El presidente Bolsonaro ama Brasil por encima de todo. Es un hombre fantástico y tiene mi total y completo apoyo", ha dicho Trump, que considera que la vida en Brasil es mucho mejor desde que gobierna el líder de extrema derecha.

Además de elegir presidente de la República, los brasileños eligen este domingo también a los gobernadores de los 27 estados, la renovación completa de la Cámara de Diputados, parte del Senado y los representantes de las asambleas legislativas estatales. Aunque Lula acabe ganando las elecciones, el Congreso será posiblemente el más conservador de la historia reciente de Brasil, lo que supondrá un importante desafío para el antiguo líder sindical, que entre sus promesas están las de aumentar los programas sociales y mayores controles medioambientales.

 
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