Radiografía del turismo y la hostelería este verano: los viajes nacionales salvan el sector, pero la falta de camareros evidencia la precariedad estival

Madrid

Termina el primer verano normal después de dos años con restricciones por la pandemia de coronavirus. El balance del sector turístico y hostelero es positivo, en general. "Creemos que va a ser un verano donde las cifras de recuperación de llegada de turistas y actividad van a estar, si no cubiertos los resultados de 2019, muy cercanos, en torno a la normalidad", ha celebrado el secretario general de Hostelería de España, Emilio Gallego.

Aunque no hay cifras definitivas, según la patronal los españoles han respondido muy bien y con una clara diferencia a los años previos a la pandemia. "Los españoles nos hemos quedado más en España, hemos viajado menos al extranjero y esto ha permitido que zonas turísticas donde el turismo residencial es muy importante, hayan estado muy dinámicas este año", ha dicho Gallego, que confirma que los destinos de sol y playa han vuelto a ser el reclamo principal, también para los extranjeros debido a la incertidumbre en buena parte de Europa por la invasión rusa en Ucrania.

Sin embargo, Gallego lamenta que el turismo de larga distancia aún no se haya recuperado. "El entorno asiático o australiano, que ese tipo de mercado es minoritario, pero cualitativamente muy importantes sobre todo para los destinos urbanos, de lujo, Madrid o Barcelona, no están en una situación de recuperación previa al 2019", ha indicado.

El desorbitado precio de la electricidad y los incendios perjudican al sector

En general, ha sido un verano muy bueno, pero la escalada en el precio de la electricidad o los incendios han influido en las cifras de ocupación. "Tenemos un gravísimo problema con los costes de la electricidad, consumimos en las franjas horarias en las que la electricidad es más cara porque las comidas o las cenas hay que prepararlas en las horas que son. Por lo tanto, nuestras empresas están sufriendo una pérdida de competitividad importante", ha lamentado Gallego.

Desde el entorno rural, el presidente de la Asociación Española de Turismo Rural, Ventura García, también ha celebrado la ocupación de este verano que ha estado en torno al 80 o 90%, aunque con matices. "Si en vez de 100 a repartir somos 50, el porcentaje de ocupación en los que quedan es un poco más alto, pero hay que tener en cuenta que algunos establecimientos no han podido abrir o han tenido que anular", ha explicado.

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Los incendios que han asolado España este verano también han provocado el cierre de algunos establecimientos o el miedo de algunas personas que han cambiado su destino a última hora. Lo que más han notado este año es el cambio en el perfil de los viajeros en el turismo rural. "Esto hace que se desdibuje un poco la filosofía de mantener el territorio, no es lo mismo un grupo de amigos que quiere venir a hacer fiestas que una familia que venga a descansar con sus hijos", ha comentado.

La mitad de los empleos en hostelería sin cubrir

Otro sector que ha resurgido con fuerza después de la pandemia ha sido la hostelería y aunque ha contado con un consumo superior y más clientes que hace un par de años, los empleados no han sido los mismos. Según una encuesta que ha realizado Hostelería de España, el verano ha dejado sin cubrir la mitad de los empleos y más del 65% de los empresarios aseguran tener problemas para encontrar a personal cualificado.

Según los datos de la patronal, la mitad de las 100.000 vacantes que el sector ha ofertado para este verano han quedado desiertas porque ha sido imposible encontrar personal disponible. Los empresarios aseguran que es la cualificación el principal escollo a la hora de contratar, seguido del rechazo a los horarios, la baja incorporación de los jóvenes al mercado laboral y el trasvase a otros sectores como la construcción o el comercio a raíz de las restricciones derivadas de la pandemia.

Sueldos insuficientes y falta de derechos

Los camareros no están de acuerdo con los argumentos del estudio y señalan que la principal causa por la que falta personal es por la precariedad: sueldos insuficientes, horas excesivas y muy pocos días libres. "Los hosteleros no respetan los convenios de los trabajadores, no respetan los derechos", ha asegurado Soy Camarero, el famoso usuario de Twitter conocido por denunciar situaciones de precariedad en la hostelería.

"Solemos libar un día a la semana en vez de dos. En las zonas de costa además no libras ningún día en todo el verano y no encuentran camareros por eso", ha señalado, y concluye que: "La gente se cansa de que no se le respeten los derechos y de vivir para trabajar".

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