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Sanna Marin se disculpa por una foto "subida de tono" de dos mujeres besándose en su residencia oficial

La primera ministra de Finlandia se ha visto envuelta en una nueva polémica por una fiesta privada durante sus vacaciones

La primera ministra de Finlandia, Sanna Marin. / KIMMO BRANDT (EFE)

La primera ministra de Finlandia, Sanna Marin.

Madrid

La polémica por la fiesta privada en la que estuvo la primera ministra finlandesa, Sanna Marin, en sus vacaciones continúa. Después de filtrarse vídeos donde salía cantando, bailando y bebiendo, y someterse a un test de drogas -en el que dio negativo- a petición de una oposición escandalizada, este martes se ha disculpado por la difusión de una foto subida de tono.

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En la imagen se ve a dos mujeres besándose mientras se cubren los pechos desnudos con un cartel que pone 'Finlandia'. La fotografía fue tomada en la residencia oficial mientras celebraba una fiesta privada durante sus vacaciones y ha pedido perdón por ello ante los medios de comunicación. "La imagen es inapropiada", ha reconocido Marin durante una rueda de prensa, apenas unos días después de que tuviese que salir al paso de las críticas generadas por unos vídeos privados en los que aparecía de fiesta.

"Pido disculpas. Ese tipo de fotografía no se debería haber tomado, pero más allá de eso, no pasó nada extraordinario en el encuentro", ha aclarado la dirigente, de 36 años. Marin ha explicado que que la imagen fue captada en la residencia oficial donde continuaron la fiesta tras haber asistido a un festival de música. La primera ministra ha explicado que se trató de una fiesta privada organizada durante sus vacaciones y que ningún invitado entró en la residencia principal.

"Tomamos una sauna, fuimos a nadar y estuvimos en el jardín, pero no entramos al edificio principal. Sólo usamos los aseos para invitados de la planta baja, que es donde al parecer se tomó esa foto", ha señalado, y ha dicho que las dos jóvenes formaban parte de un grupo de amigos a los que invitó a la residencia oficial el pasado 9 de julio, después asistir a un festival de rock en el que le tomaron una foto en chaqueta de cuero y "shorts" vaqueros que dio la vuelta al mundo.

Los servicios de seguridad han descartado también que hubiese algún problema durante ese día. Las entradas a la residencia permanecieron cerradas y todas las instalaciones estaban bajo vigilancia. Además, han recordado que, en este tipo de casos, todos los invitados están identificados.

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No es la primera vez que Marin tiene que dar explicaciones por lo que hace en su vida privada. Además de los vídeos de hace unos días donde se le ve divertirse con amigos y por los que se vio obligada a hacerse un test de drogas, en diciembre también fue cuestionada por no aislarse tras el positivo en COVID del ministro de Exteriores, Pekka Haavisto, y salir a una discoteca.

La dirigente finlandesa es la primera ministra más joven del mundo junto al presidente austriaco Sebastian Kurz, de 35 años, y quizá por ello, se cuestiona constantemente su capacidad para dirigir el Ejecutivo.

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