Pensarlo antes de que ocurra

Madrid

'Fratelli d'Italia' es el primer verso del himno nacional italiano y también el nombre de un partido político que nació hace relativamente poco, en 2012, pero que es heredero de otro mucho más famoso, muy conocido en los años 70 y 80 del siglo pasado, el llamado Movimiento Social Italiano (MSI) de Giorgio Almirante, un heredero a su vez de la ideología fascista de Mussolini. Los dirigentes de Fratelli se definen a sí mismos como conservadores nacionalistas, pero basta escuchar el mitin que dio esta semana su principal dirigente, Giorgia Meloni, en Marbella, invitada por Vox, para reconocer la voz del MSI y la herencia de Almirante. El MSI tenía un lema muy apropiado para Meloni y seguramente para VOX: “No repudiar, no restaurar”. Es decir, nunca criticar ni rechazar públicamente el pensamiento fascista, pero sin pretender restaurar un régimen autoritario, sino ganar en las urnas, en coalición con otros partidos próximos. La misma ideología fascista, pero con otra estrategia política, mucho más apropiada para los nuevos tiempos y las exigencias democráticas. Es importante escuchar a Meloni porque su discurso, el que enardece a los seguidores de VOX, es una simple revisión del fascismo histórico: un orden nuevo basado en valores tradicionales, ley y orden, rechazo a minorías sociales y libertades civiles. Moreno Bonilla dice que no se ve con Macarena Olona como vicepresidenta y los andaluces deberían pensárselo antes de permitir que eso ocurra.