‘Calasparra, denominación de origen y destino’ descubre el patrimonio, la cultura, la gastronomía y los impresionantes parajes de este enclave del noroeste murciano
La alcaldesa de Calasparra ha contado los detalles de esta campaña que recoge la amplia oferta que se pone a disposición del visitante
Calasparra
Calasparra cuenta con un producto único como es su arroz con Denominación de Origen sobre el que se forja una parte importante de su cultura.
Teresa García, alcaldesa de este municipio del Noroeste murciano ha contado los detalles de la campaña ‘Calasparra, denominación de origen y destino’ centrada en el potencial de su entorno natural, de las fiestas y tradiciones y por supuesto la gastronomía con el arroz como protagonista, pero se también se ampara en poner en valor la belleza de los parajes, el espíritu acogedor de los calasparreños y calasparreñas y la historia del patrimonio. “Habla de esperanza, de arroz, de cultura, de tradiciones, pero también de progreso, futuro y modernidad”.
A este municipio del noroeste de la Región de Murcia, dentro de las Tierras de la Vera Cruz, lo bañan cuatro ríos (Segura, Argos, Quípar y Moratalla). Además, Calasparra posee la única Reserva Natural Terrestre de la Región de Murcia, la reserva de Soto y Bosques de Cañaverosa, las montañas en el horizonte y, por supuesto, los arrozales.
Calasparra oferta una propuesta turística que la convierte en un destino único. Un recorrido en barca, atravesando el Cañón de Almadenes, permite adentrarse en las pinturas rupestres encontradas en los Abrigos del Pozo, a orillas del Segura.
También pueblos como los íberos, romanos y musulmanes han dejado en Calasparra un bello legado artístico que puede admirarse en sus calles y en sus edificios más emblemáticos. El casco antiguo; la hermosa plaza de la Corredera; la Torre del Reloj; la Encomienda, la Casa Granero, que alberga el Museo de la Villa de Calasparra.
Uno de sus rincones más característicos es el Santuario Nuestra Señora de la Esperanza, que embarga al visitante de una sensación de estar fuera del tiempo.
Otra joya, en este caso subterránea, es la Cueva del Puerto, Este tesoro está considerada como un ejemplo mundial de cavidad hipogénica por la multitud de morfologías de origen hipogénico.