La contraportada del Real Murcia: "Al verano le pido un plan"

Murcia

Hola, Victorio.

Se han puesto de modas los adjetivos extremos, tanto para referirse a lo positivo como a lo negativo. Hay una necesidad de exagerar la realidad sólo para intentar llamar la atención. Un gol ya no es bonito, ahora es brutal. Un jugador ya no hace una mala temporada, ahora hace una temporada catastrófica.

Es cierto que nuestra sociedad está cada vez más polarizada, pero no piensen que sólo se trata de política. También al deporte llega la ola expansiva de crispación y de reduccionismo: o triunfadores o perdedores. O éxito épico o desastre absoluto. Es lo único que parece haber.

Pienso en estas cosas cuando leo a muchos decir que la temporada del Murcia ha sido un fracaso. No estoy de acuerdo. Un fracaso habría sido lo que en algún momento de la temporada pareció que podía terminar pasando: bajar a Segunda Federación. Quizás crean que exagero, pero yo no he visto a este Murcia superior en calidad a prácticamente ningún equipo de la categoría.

Es más, hemos sido superiores sólo en base a virtudes de equipo humilde, que Pablo Alfaro supo potenciar: la defensa, el orden, el no complicarse. En ataque, en calidad ofensiva, hemos sido mediocres.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Por ejemplo, hemos acabado la temporada con 38 goles a favor, los mismos que el Sabadell, que ha bajado en el otro grupo de Primera Federación. Y sólo hemos metido dos goles más que el San Fernando, que ha descendido en nuestro grupo. Hemos acabado la temporada con los mismos goles metidos que encajados. Nuestro goalaverage es de cero. ¿De verdad pensábamos ascender con tan poco?

Ahora, claro, queremos echar a todo el mundo. Pero hay una diferencia de responsabilidad: éste ha sido un equipo mal planificado. No mal entrenado. Es una diferencia importante.

Al verano le pido una cosa: un plan. Que el Murcia tenga un plan, y que ese plan se ejecute bajo criterios solamente futbolísticos. No criterios de negocios, no criterios de amiguismos. Sólo fútbol. Nuestra mayor tranquilidad es que toque el Murcia que toque el año que viene, le seguirá acompañando una marea de gente que ya no quiere saber nada de otro escudo. Sólo les vale ese triangulito coronado que representa al club de la ciudad de Murcia. Ese club que tarde o temprano volverá, y que volverá más fuerte que nunca.

Buenas tardes.