María Dueñas ofrece su "medicina" a los usuarios de La Botica del Libro
La escritora madrileña, aunque cartagenera de adopción, ofreció a los asistentes sus vivencias dentro del mundo de la literatura
Cartagena
¿Habrá algo más bonito que incitar a los más pequeños de la casa e leer? Eso, sin duda, les hará ser personas interesadas por cuanto sucede a su alrededor y, sobre todo, más cultas. Con esa premisa nació 'La Botica del Libro', una una iniciativa que pretende ayudar a aquellos sectores de la población con menos recursos a acceder a algo tan sencillo y, a la vez, que tanto placer da, como es la lectura.
Este pasado jueves la asociación ubicada en el barrio cartagenero de José María La Puerta recibió la visita de la célebre escritora madrileña, aunque cartagenera de adopción, María Dueñas. La autora de "El Tiempo entre Costuras" deleitó a los asistentes con algunas de sus vivencias en el mundo de la escritura y acercó a los más jóvenes el amor que siente por las letras y la literatura. Con motivo de su visita, Radio Cartagena se desplazó hasta la sede de la entidad ubicada en la Calle Garellano de la ciudad Portuaria.
Iniciativas como estas, le valieron a la entidad cartagenera el Premio Nacional al Fomento de la Lectura 2018. Un galardón que venía a reconocer "el valor social que se le atribuye a la lectura y la convicción que sus responsables muestran respecto al poder de los libros para mejorar la vida de las personas". Sin embargo, esta "botica" no sería nada sin la ayuda de todos los voluntarios (profesores, educadores o vecinos) que dedican su tiempo a promover la educación como medicina para la tolerancia y la convivencia.
Por tanto, 'La Botica del Libro' no se limita a dar un libro para que los vecinos lo lean, sino que va mucho más allá. Los principales logros de la entidad se están consiguiendo en los más pequeños y los adolescentes. Y es que, el trabajo de 'La botica' está coordinado con los centros escolares de ambos barrios para llevar un seguimiento de la asistencia a clase de los usuarios. De hecho, lo primero para poder acceder a los libros y a los talleres que organizan desde la iniciativa es no tener faltas en clase y hacer los deberes. A partir de ahí, el mundo de los libros se vuelve totalmente accesible.