El Castellón devuelve a la realidad al Real Murcia (2-3)

Murcia

El Murcia está a mucha distancia de juego respecto a los de arriba, pero un partido de fútbol puede ser como una travesía naval: con tramos de marejada y otros donde se puede navegar a toda máquina. Pedro León falló un penalti en la última jugada que privó a los pimentoneros de empatar ante un gran equipo.

La cita contó con un ambientazo sin precedentes esta temporada. Casi 5.000 personas aterrizaron desde tierras castellonenses, mientras que la afición murciana tampoco quiso perderse la cita desde el recibimiento.

Pablo Alfaro encontró un esquema de garantías y mantuvo para la cita a los mismos diez jugadores de campo, con la única novedad de Manu García que volvió a la portería después de su sanción. La intención de los pimentoneros fue tener el balón y generar, como durante toda la era del aragonés, superioridad por banda. Pero esta vez no funcionó.

Desde el inicio el Castellón demostró porqué es el líder de la categoría. Con el esférico, numerosas triangulaciones y plena comodidad con la pelota en terreno rival. El Murcia recogió el papel sobrante de aprovechar los huecos del rival con transiciones rápidas.

Superioridad y dominio del Castellón desde el inicio

Tres minutos necesitó para abrir la lata. Todo empezó con un saque de esquina del Murcia mal sacado y convertido en un contraataque orellut. Ese mismo ataque finalizó con hasta dos intentos de gol de los visitantes que en el tercer intento y con un centro al segundo palo, estrellaron en el fondo de las mallas ka pelota con un cabezazo de Douglas.

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Arrancó con tormenta y viento intempestivo el navío grana, que se intentó recomponer después del primer gol con la velocidad de Loren Burón, y así pudo aprovechar un contragolpe con llegada a área que colocó al segundo palo y que Carrillo no se entendió con Vega para el remate, pero poco más. Enseguida, la zaga grana demostró su nerviosismo. Marc Baró en la frontal del área despejó mal un balón que se marchó para atrás y que provocó que Alberto González se comiese el bote. Así, el delantero anotó placer el segundo delante de Manu García.

Sin embargo, con el parón para la hidratación, el choque cambió. Loren forzó la segunda amarilla del lateral izquierdo Jozhua: se puso delante y fue derribado, lo que provocó la expulsión del zaguero visitante. Desde ese momento el Real Murcia encontró un claro en su océano particular. Ese libre directo terminó con un remate de Larrea de cabeza y una intervención extraordinaria de Gonzalo Crettaz.

Los pimentoneros se convirtieron en un equipo correoso. Loren Burón se mostró vertical y con su pillería particular, lo que siguió provocando ocasiones y tarjetas amarillas, pero el gol no llegó. No obstante, sí que hubo polémica con el propio Burón, que cayó dentro del área, aunque el árbitro entendió que no hubo pena máxima.

Desde la expulsión el Murcia dominó; la entrada de Pedro León, determinante

En la segunda parte el club de la capital del Segura encontró el cielo despejado; y se complicó para los de la comunidad valenciana. Pedro León entró para abrir huecos entre la zaga rival, pero sobre todo para liderar a un equipo necesitado de su capitán en una expedición. Así fue como con su presencia, León reactivó a sus compañeros. Llegó el primero de los granas por Alberto González en remate de un saque de esquina con lo que enmendó el error de la primera mitad.

Con los cañones encendidos, el Castellón encontró el tercer gol con un remate cruzado dentro del área, pero tan sólo cinco minutos después, Víctor Rofino, protagonista esta semana del SER Deportivos, disparó desde fuera del área para volver a recortar distancias.

La moral de los locales se disparó para buscar el empate. Todo el juego se desarrolló en el campo del Castellón, arropado atrás para protegerse del temporal. Aunque el Murcia merodeó el área rival, no fue hasta la última jugada cuando todo se pudo decidir. Pedro León falló el penalti con el que el Murcia pudo haber sacado un punto. Crettaz lo atajó y el árbitro determinó el final del partido con el resultado final de 2-3. Pese al claro en el horizonte, los locales no pudieron remontar el choque y naufragaron en la orilla.

Ahora el Real Murcia vuelve a estar en una situación comprometida con la quinta plaza. El domingo se juega el Ceuta - Antequera en el Alfonso Murube, un duelo vital con los dos rivales directos que quieren esa plaza de playoffs. A los de Alfaro le quedan nueve puntos, sigue sin depender de sí mismo, y ha visto encarecido el objetivo final de la temporada.