Un Real Murcia sin alma hace aguas en Ceuta

Murcia

Partido vacío y sin pena ni gloria para el Real Murcia en Ceuta. Desde luego, lo que más destacó fue la pena, con una derrota, porque la gloria estuvo ausente sobre todo en la primera mitad. Munúa puso a Manu García en meta, flancos defensivos para Santos y Baró y eje para Alberto y Andrés. En el centro del campo, Isi y Pina acompañaron a Rodri Ríos, de nuevo como enganche entre la medular y el último tercio de campo donde anduvieron Carrillo arriba y Vega y Rojas en costados.

Empezó mandando el Ceuta, primeros acercamientos ante un Murcia inoperante. La inactividad grana, además, se acentuó con individualidades de Vega y Rojas, pero sin brotes verdes de equipo en un desierto de ocasiones. Quizás lo más reseñable fue un acercamiento de Vega en el 19, pero sin mayor trascendencia. Quien sí siguió generando peligro fue el Ceuta.

De tanta insistencia o, al menos, idea de juego, llegó la apertura del marcador. Doble paradón de Manu García, falta de tensión defensiva y a la tercera la vencida. Teguía rebañó un balón suelto que Tomás Pina no llegó a despejar. La falta de concentración se paga y ahí quedó plasmado. Esto sucedió en el 25 y en el 29 a Ríos le anularon un gol por fuera de juego. Fue el único petróleo para sacar de una primera parte nefasta para los de Munúa. El que mejor estuvo fue Manu, que volvió a hacer una gran parada pasa salvar muebles antes del descanso.

La segunda mitad no mejoró lo presente en los primeros minutos. El primer cambio llegó en vestuarios, Imanol entró al campo por Carrillo, el sacrificado por el entrenador uruguayo. Pasaron los minutos, el Murcia seguía sin ver claridad arriba y el Ceuta quiso apretar clavijas. Manu García tuvo que intervenir otra vez. Su buena colocación impidió el segundo de los locales. Teguía, además siguió creciendo ante un equipo que poco a poco fue cayendo en el ostracismo de su propio encuentro.

Con los minutos pasando sin nada que ofrecer por parte de los visitantes, un intento de remate acrobático de Ríos en el 72 dio paso a más cambios en el Murcia. Rubio, Montoro y Molina entraron en el verde por Vega, Rojas e Isi Gómez. Tras esto no hubo nada más destacado hasta el 83, que fue el debut de Larrea desde su fichaje con los granas en verano. Ingresó en el terreno de juego por Tomás Pina, pero no hubo más ocasiones generadas. Solo una, a balón parado, de Molina en el 88. La única y más clara del partido (1-0).

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