El micromentario de Pepe Belmonte: 'Un problema ya resuelto que vuelve a salir en campaña'

Murcia

Muy mal le tienen que ir las cosas al PP de cara, sobre todo, a las generales del año que viene, con un Feijoo poco centrado, con muchas carencias, para que este partido de la oposición tenga que recurrir a argumentos tan falsos como peregrinos, anunciando, por activa y por pasiva, que ETA, el grupo terrorista desaparecido definitivamente hace más de una década, es quien gobierna en España.

Hay que ser muy miserable para volver a poner sobre la mesa un problema ya resuelto, un asunto que habíamos finiquitado del todo, y que causó tanto dolor a tantas familias, y, también, al conjunto de los españoles.

Los tribunales han dejado muy claro que los que fueran en su día componentes de la banda armada, una vez cumplidas sus condenas, tienen todo el derecho del mundo a figurar como candidatos en sus respectivas formaciones políticas. Nos guste o no, la ley es la ley, aunque haya estúpidos que quieran tergiversarla.

Pero lo más triste es la insistencia de los políticos del PP, con Feijoo a la cabeza, en anunciar, como único punto de su futura campaña electoral de cara a las generales, la derogación inmediata del llamado "sanchismo", que no se refiere, precisamente, a Sancho Panza, quizá el mejor gobernador de la historia, el más humilde, justo y equilibrado, cuando tomó posesión de su cargo en la Ínsula Barataria.

Pero la verdad más cruda nos dice que, al margen de ese mantra, repetido hasta la saciedad, hasta provocar el hartazgo, el Partido Popular, no ha hecho, hasta hoy, ni una sola propuesta para que el ciudadano, la gente de a pie, sepa a qué atenerse si, finalmente, gana las elecciones. Lo que no deja de ser una auténtica burla y una manera de menospreciar la inteligencia de los votantes.

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Con todo, para los más desmemoriados, conviene recordar aquí que, el que fuera ministro de Propaganda del gobierno de Hitler en la Alemania nazi, Joseph Göbbels, decía que "una mentira repetida mil veces, se convierte en una verdad".

Pepe Belmonte