Los padres de un colegio de Cartagena se quejan de que sus hijos llegan con hambre a casa porque las raciones en el comedor son escasas
La presidenta del AMPA del Colegio Público San Isidoro y Santa Florentina pide transparencia en los menús y MC anuncia que llevará al Pleno del Ayuntamiento que se asegure que se sirven unos menús dignos en los centros educativos de Cartagena
Colegio San Isidoro y Santa Florentina de Cartagena / Consejería de Educación
Cartagena
Noelia Paretas, que es la presidenta de la Asociación de Padres y Madres del Colegio Público San Isidoro y Santa Florentina de Cartagena ha mostrado la indignación que hay en el colectivo de padres de este centro por el mal servicio que da el comedor escolar donde se apunta que las raciones son muy escasas y sus hijos llegan con hambre a casa. El tema ya fue expuesto a la consejería de Educación sin que hasta la fecha se haya solucionado. Están a la espera que a finales de este año se cumpla el contrato con la concesionaria que lleva el servicio de comida y no se proceda a su renovación.
El concejal de MC, Ricardo Segado sobre el mencionado servicio de comida ha puesto de relieve que “la escasez de las raciones, llegando a ofrecer media pieza de fruta o un simple trozo de pescado en el menú provoca que los niños lleguen a casa con hambre, como han denunciado los padres de los alumnos del centro”.
Segado ha denunciado que “se trata de una situación intolerable, ante la que no podemos mirar hacia otro lado. A ello se suma el peligro al que desde Murcia exponen a los alumnos de la Casa del Niño, por el riesgo de desprendimiento de unas instalaciones que se caen a pedazos”.
Debido a la situación descrita ha adelantado que "exigiremos en el Pleno que la administración regional asegure que se sirven unos menús dignos en los centros educativos del Municipio de Cartagena".
Los padres del Colegio San Isidoro y Santa Florentina también ha denunciado ante la Consejería de Educación el estado general de la Casa del Niño arrastrando una gran cantidad de deficiencias como "el riesgo de desprendimiento de la fachada y la cornisa; un interior del edificio que se cae a pedazos con la única protección de una valla o unos aseos casi tercermundistas, que fueron una solución temporal aportada por la AMPA y que ni Ayuntamiento ni Comunidad se han preocupado en adecentar, entre otras muchas cuestiones", según MC
