Alcoa anuncia un nuevo socio para San Cibrao y asegura que quiere quedarse en A Mariña

Lugo

Alcoa pone de manifiesto su intención de mantenerse en la comarca de A Mariña y anuncia más inversiones y un nuevo socio para la planta de San Cibrao. Con casi un año de retraso se ha celebrado la décimo novena mesa de seguimiento del acuerdo de viabilidad y la multinacional ha querido insistir en su interés en seguir produciendo aluminio en Lugo. Avanzan que están muy próximos a ordenar el rearranque de las cubas y el recrecimiento del depósito de lodos rojos.

El delegado del gobierno en Galicia, Pedro Blanco, manifestaba optimismo a la salida del encuentro: "Creo que a diferencia de lo que pasaba hace un tiempo, cuando la empresa planteaba una serie de necesidades e incluso hubo algún temor porque todo esto no tuviese viabilidad, a día de hoy no solo vemos presente, sino futuro para la planta de San Cibrao". Aseguraba Blanco que "tenemos encima de la mesa una oportunidad muy importante para contar con Alcoa durante mucho tiempo".

Por su parte, la conselleira de Industria, María Jesús Lorenzana, celebraba el anuncio de Alcoa de que a finales de este 2025 pudiese dejar de considerarse "empresa en crisis", aunque según la multinacional necesitarían para ello liberar el fondo de garantías. Sumando los 25 millones de euros que había comprometido el socio Ignis podrían acceder a ayudas de los gobiernos para las electrointensivas.

De lo sucedido en los últimos meses, la administración ha explicado que el estado ha comprometido aumentar las compensaciones por CO2 al máximo y también a sacar adelante los parques eólicos que se habían paralizado. La Xunta ya ha completado su propio compromiso con Alcoa al autorizar el recrecimiento del DBR.

Terminados estos procesos, ambos gobiernos entienden que desde las instituciones se habría hecho todo lo posible porque Alcoa mantuviese su producción en San Cibrao, y piden a trabajadores y a la multinacional que acuerden una hoja de ruta que contente a ambas partes.

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Los trabajadores dudan

Alcoa aseguraba en la mesa de seguimiento que con el acceso al fondo de garantías, las aportaciones de Ignis y un nuevo socio y su hoja de ruta, la planta sería viable. Aunque calculan que los dos próximos años produciría pérdidas, esperan que al tercero empiecen a llegar los beneficios.

Sin embargo, los representantes sindicales dudan aún de las verdaderas intenciones de la multinacional al no recibir la noticia que esperaban. Sigue posponiéndose la construcción del horno de cocción de ánodos, cuestión que consideran indispensable para la viabilidad de la planta. José Antonio Zan, presidente del comité de empresa, recordaba "la importancia que tiene para la producción y los gastos inmensos que generará traer ánodos de fuera, cosa que no sería viable".

Como no se fían de que el plan que proyecta Alcoa vaya a funcionar, proponen que el ICO habilite una línea de crédito para financiar las obras, y sobre todo que el estado ofrezca un paracaídas si todo falla. "Pedimos a la administración que si esto no se cumple pasemos a la SEPI", reclamaba Zan. Sin embargo, el gobierno central ya lo ha descartado. "Se nos ha dicho que la SEPI no puede resolver los problemas de todas las empresas de España rescatándolas", añade el representante sindical.