Organizar la boda de una hija por videollamada y otras historias de la emigración femenina

Lugo

Una mujer caboverdiana pasea por un mercadillo en los Estados Unidos mientras en la pantalla de su teléfono su hija, del otro lado del océano Atlántico, escoge los objetos, las telas y todo lo que necesita para organizar su boda. Así es como la madre, a pesar de estar a miles de kilómetros de distancia, le ayuda cos los preparativos para el casamiento. Todas las cousas que la joven, Camila, escoge a través de una videollamada llegarán a Cabo Verde dentro de un bidón lleno hasta los topes.

Esta es una de las historias que Celeste Fortes explora en un documental, junto a la de una joven que sueña con recibir uno de esos bidones que nunca llega y la de una mujer que anda a los busca para vender lo que llega en su interior. Son el elemento de unión a través del que las mujeres caboverdianas en la diáspora pueden mantener un vínculo con su hogar y con su familia en su país natal, y 'Bidon: Nação Ilhéu' el título da cinta.

"El documental cuenta la historia de la emigración femenina caboverdiana a través del envío de bidones y de cómo estas mujeres que salen de su país mantienen contacto con sus familias", explica la directora. Según explica, esta es "una práctica muy arraigada en Cabo Verde" y los bidones llegan desde diferentes partes del mundo: Estados Unidos, Holanda, Portugal, Francia, y también desde la costa gallega, desde Burela.

En ellos pueden viajar todo tipo de cosas: "Todo lo que no sea perecedero y coja, desde zapatos, ropa o alimentos hasta productos de higiene, como papel higiénico, e incluso he visto que se enviaban bicicletas en piezas". Hay familias que los reciben mes a mes, otras no tienen posibilidad de hacer envíos tan recurrentes. "Quisimos hacer el documental", continúa Fortes, "para mostrar que se mantienen conectadas a pesar de la distancia, estos bidones son importantes para no perder los vínculos con su familia y su tierra, pero también para matar la soledad".

Confiesa la directora de la cinta que siempre llora cuando ve la parte del documental de la boda de Camila. Su madre no pudo viajar para acompañarla, solo pudo ver la cara de su hija y de su yerno a través de una videollamada, pero "estuvo presente a través de todas las cosas que le enviaba en los bidones". En los Estados Unidos la madre de Camila y otros parientes emigrados hicieron también fiesta para celebrar la ocasión.

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Historias conectadas

Este relato de la emigración femenina que se compone en 'Bidon: Nação Ilhéu' no es extraño a otros países con tradición migrante. "Yo veo que las historias que cuenta el documental no son tan distintas que las que pueden escucharse en otros lugares donde lo hemos proyectado, como la República Checa o, en España, Galicia". "Son historias conectadas", reflexiona Celeste Fortes, "y eso demuestra que somos todos iguales, tenemos los mismos dilemas, las mismas historias".

De hecho, apunta que "el objetivo de hacer este documental es combatir el racismo, y yo creo que une a las personas y las vuelve más empáticas con los migrantes, con los que vienen y los que se quedan". "Yo soy antropóloga, activista, antirracista y feminista", continúa, "y veo en esa resistencia al otro que todavía percibimos una forma de persistencia colonial que tenemos que abandonar, y este documental es una propuesta de interculturalidad, que nos muestra la realidad y nos hace sentirnos en otra piel".