El joven que en verano de 2022 le dio un puñetazo en la cara a otro hombre en Pontevedra confiesa que iba “bebido y drogado” cuando lo agredió
Carlos David Coello López reconoció los hechos, mientras la víctima negó cualquier intercambio de insultos con él esa madrugada


Visto para sentencia el juicio celebrado esta mañana en Pontevedra contra un joven acusado de agredir a otro con un puñetazo en la cara en julio de 2022 en plena madrugada en la calle Michelena que le causó lesiones graves y permanentes. El acusado, Carlos David Coello López, reconoció los hechos a preguntas de la fiscal, acusación particular y defensa. Coello puede enfrentarse a una condena de nueve años y medio de prisión; alejamiento y prohibición de comunicarse con la victima durante doce años y al pago de 151.000 euros en indemnizaciones, además de veinte mil euros al Sergas por la asistencia sanitaria que tuvo que recibir el agredido.
Los hechos ocurrieron sobre las cinco y media de una madrugada de verano de 2022 en la calle Michelena. El agresor declaró que esa noche “salí de copas con un grupo de amigos; el agredido se paró y me dijo “me cago en tus muertos”; le dije: ¿estás seguro?, me dijo que sí y le di un puñetazo cerca de la boca para apartarlo de mí”. El joven agredido cayó de espaldas y “no me preocupé de lo que pasó. No le di importancia”, afirmó Coello. El agresor explicó en sede judicial que una vez que le dio el puñetazo, se fueron a casa de un amigo a seguir fumando y bebiendo.
En la casa del amigo, en el portal, este grupo de amigos recrearon el ataque, el puñetazo que le dieron al otro joven en Michelena. El agresor declaró que esa noche estaba bajo los efectos del alcohol y la cocaína y a preguntas de su abogada dijo que no era su intención “dejar a la víctima tan mal”. Fruto del puñetazo la víctima cayó al suelo golpeándose la cabeza contra la acera. Estuvo ingresado en la UCI y precisó dos intervenciones quirúrgicas en la cabeza, incluyendo el implante de un sensor de presión intracraneal.
La víctima, técnico de sonido de profesión, declaró telemáticamente que sufre graves problemas de salud que impiden desarrollar su trabajo con normalidad, al quedar sordo del oído derecho. Desmintió que le dijera “me cago en tus muertos, que él nunca estuvo metido en ninguna pelea”.
Posteriormente declaró un hombre, testigo de la agresión, que no conocía a ningún implicado en el altercado. Este hombre dijo que Coello y su grupo de amigos “iban buscando jaleo y le dijo al agredido: mira donde vamos a encontrar a esta maricona”. En ese momento le sacudió el puñetazo y dijo “que estáis haciendo, dejarlo tranquilo”. Cuando fue a socorrerlo tenía un charco de sangre detrás de la cabeza.
Por la sala esta mañana pasaron otros testigos y policías nacionales que asistieron al joven. Uno de esos policías ya conocía al agresor de otros operativos por drogas y hechos similares. La Fiscalía y acusación particular mantienen sus peticiones de pena mientras la defensa pide su absolución o subsidiariamente delito de lesiones con imprudencia y atenuantes de drogadicción dilaciones indebidas y confesión.