El PP de Vigo acusa al gobierno local de “boicot” al suspender la licencia del centro de asociacionismo de la Xunta
“Abel Caballero no quiere que el tejido social y cultural de Vigo tenga un lugar digno” afirma el portavoz popular Miguel Martín
Miguel Martín, portavoz del grupo municipal del PP de Vigo, en la plaza Orencio Pérez González
El PP de Vigo ha acusado al alcalde de la ciudad, Abel Caballero, de "boicotear" el centro de asociacionismo proyectado por la Xunta al suspender cautelarmente la licencia de obra hasta que se resuelva si el inmueble y el suelo objeto de actuación es de titularidad municipal o autonómica.
"Lamentablemente, Abel Caballero no quiere que el tejido social y cultural de Vigo tenga un lugar digno donde poder ejercer su actividad", ha indicado el portavoz del PP en Vigo, Miguel Martín.
Para él, en 17 años, el alcalde "nunca ha querido dar una solución" a las asociaciones que llevan décadas reclamando un espacio y, "cuando por fin la hay, la boicotea".
"Lo hace única y exclusivamente porque proviene de la Xunta de Galicia. Una vez más, Caballero anteponiendo sus intereses electorales al beneficio de la ciudad. Porque está convencido de que le funciona políticamente bloquear las inversiones de la Xunta en Vigo para explotar al máximo su falso mantra", ha asegurado Martín.
Para el PP de Vigo, el "nuevo ataque no solo va dirigido al Gobierno gallego", sino también hacia "los colectivos sociales y culturales de Vigo".
"Una vergüenza"
"Es una vergüenza que dos meses después de conceder la licencia municipal de obra la suspendan ahora", ha afirmado Martín.
El portavoz municipal del PP ha afeado al "mismo gobierno municipal que lleva años sin ser capaz de sacar adelante el plan general de urbanismo" que ahora admita "su ignorancia" en lo que respecta a los bienes del municipio.
Martín ha asegurado que Caballero "pone todas las trabas posibles a las inversiones de instituciones gobernadas por el PP".
El pasado 29 de noviembre, Vigo autorizó a la Xunta esa obra para la reforma integral y ampliación del edificio de los antiguos juzgados para asociaciones y entidades sociales.
La licencia fue otorgada por el concello sin prejuzgar la titularidad del inmueble ni los derechos de propiedad. Su concesión, según la resolución de la Xerencia de Urbanismo, no conlleva ningún reconocimiento sobre la propiedad del inmueble.
El documento refleja que, tras la concesión de la licencia, la Gerencia "tuvo conocimiento de que el inmueble donde se construyó el edificio objeto de las obras es de propiedad municipal".
Según la Xunta, el inmueble fue dado de alta en el catastro inmobiliario a nombre de la Administración autonómica y, en 2024, esta pagó en concepto de el impuesto sobre bienes inmuebles 41.240 euros.
