Giráldez devuelve el optimismo al Celta

Vigo

Cambio radical del Celta y para bien. En menos de una semana, Claudio Giráldez le ha dado un giro al juego del equipo y en su primer examen consiguió un sobresaliente tras vencer por 1-2 al Sevilla con todo merecimiento.

El técnico porriñés mantuvo su apuesta por tres centrales como en el filial y dispuso un once con más canteranos, que respondieron a la exigencia del encuentro. Con una presión más alta y agresiva y un juego de toque, los vigueses gozaron a los 3 minutos de la primera ocasión con un centrochut de Aspas en el área pequeña que no encontró portería por poco. Por contra, el cuadro hispalense estaba encerrado atrás y apostaban por los balones largos a sus delanteros. En uno de ellos, Unai Núñez comete un fallo terrible con un control y deja a En-Nesyri en un mano a mano contra Guaita que no desaprovecha. Este tanto hizo daño a la confianza del conjunto celeste y que se unió a la lesión en la muñeca de Manquillo que le obligó a salir del terreno de juego. Su sustituto como carrilero fue, para sorpresa de muchos, Carles Pérez.

En el tramo final del primer tiempo volvieron a apretar los de Giráldez. Nyland desvió a córner un tiro de Larsen con poco ángulo. En el siguiente, un disparo cruzado de Hugo Sotelo salió rozando el poste. Pese a terminar con una posesión del 74%, el Celta no consiguió batir la portería rival. En los compases iniciales del segundo acto fue el Sevilla quien tuvo la oportunidad de sentenciar el encuentro. Hasta cuatro acciones tuvieron los atacantes hispalenses solos ante el portero, pero o bien detenía Guaita los remates o bien se iban alto. Los errores individuales de Unai cerca estuvieron de acabar en catástrofe.

Los cambios favorecen al Celta

A la hora de juego, comenzó el carrusel de sustituciones que favoreció claramente al equipo vigués. En una decisión que acabó en bronca en el banquillo, Sánchez Flores hizo un favor a los celestes quitando a En-Nesyri y Ocampos. Giráldez, en cambio, acertó apostando por Jailson y Starfelt para fortalecer la zona central. En el minuto 72, apareció el 'Renacido': en una jugada marcada de la casa, Carles Pérez controla orientado hacia dentro el balón desde el lateral del área y le pega un latigazo que sorprende a Nyland.

Seis minutos más tarde, Bamba pone un centro al área que remata Larson de espaldas y tacón al fondo de la red tras sorprender con su desmarque a Kike Salas. Remontada exprés con el décimo tanto del delantero noruego. El triunfo se pudo escapar poco después con un penalti señalado dentro del área celeste. Gracias a la intervención del VAR, Hernández Maeso corrigió su decisión al ver que no hubo contacto de Starfelt sobre Lukebakio.

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Teniendo el balón, el Celta durmió el partido en los 9 minutos de descuento y demostró que no hace falta encerrarse para defender un resultado. Con esta gran victoria, la distancia que el descenso vuelve a ser de 5 puntos, lo que da tranquilidad para trabajar a Giráldez para preparar durante dos semanas (debido al parón de selecciones) el choque contra el Rayo en Balaídos.