Todo en dos días
El Celta y Benítez se juegan buena parte de su futuro en menos de una semana contra Cádiz y Almería
Vigo
En 1986 el director norteamericano John Hughes, que luego saltaría a la fama con Solo en Casa, nos regaló una comedia adolescente que se convertiría en una película de culto para los jóvenes de los ochenta: Todo en un día.
En esa película, un imberbe Matthew Broderick interpreta al personaje de Ferris Bueller por el que estuvo nominado a mejor actor en los Globos de Oro. Ferris decide colgar clase y, en solamente un día, poder hacer todo lo que no está permitido para alguien de 17 años. En una de las escenas que se han convertido en icónicas y están entre las escenas de baile mejores del cine no musical, Ferris decide saltarse el cordón policial con su novia y su mejor amigo y subirse en una de las carrozas del desfile del Día de Von Steuben. Ahí decide realizar un perfecto playback del beatlemaníaco Twist and Shout.
Pues el Celta es el Ferris Bueller de 2024 que todo lo que no pudo hacer, lo planea en solamente dos días: Cádiz y Almería. En menos de una semana el futuro de Benítez y el futuro del propio Celta se va a jugar en esos dos partidos. Un domingo y un viernes para poder dejar ko a dos rivales directos si ganas, para mantener la distancia si no pierdes y para darles aire y meterte en un lío si pierdes. Movido al ritmo liverpooliano de los Beatles, que a Benítez no le sonará extraño, tendrá que hacer bailar y moverse coordinadamente a su equipo para superar el Todo en un día de Cádiz y el Todo en un día de Balaídos contra el Almería. Con solamente cuatro victorias en 25 partidos, cada vez le quedan menos balas en la recámara y le quedan menos oportunidades de disfrutar cual Ferris Bueller. Le quedan al Celta trece oportunidades en las que hay que incluir visitas al Wanda y al Bernabéu y medirse a los cuatro rivales más directos: Cádiz y Almería seguidos y, más adelante, recibir al Rayo y visitar Los Cármenes. Por eso el primer Todo en un día, el de Cádiz, es similar al pasado año cuando el Celta visitó en marzo Cornellá. Le sacaba tres puntos y, con la victoria por 1-3, le daba a los periquitos un golpe casi definitivo. Los dejaba a siete más el punto extra del goal average particular. Por eso es importante para la final de Cádiz tener en cuenta el 1-1 de la ida. Importante cuando menos no perder para mantener los tres puntos de ventaja y jugarse el extra point a final de Liga: el Celta tiene en estos momentos un -10 por un -20 del Cádiz. Es decir, cuenta con un colchón de 10 goles en caso de empate.
El segundo Todo en un día versión Almería también es complicado porque los andaluces todavía no han ganado partido alguno. Cada vez con menos margen pero más a la desesperada, están haciendo partidos para sumar más como en el Bernabéu o el otro día en Granada. Merecieron ganar ambos encuentros pero no pudieron hacerlo. El Celta ganó in extremis al Almería en el 87. Por eso aquí ya no quedan excusas para el técnico madrileño ante dos rivales directísimos, con partidos de 7 puntos en juego (tres que sumas, tres que no suman y el goal-averge) y ante dos rivales que uno lleva sin ganar desde septiembre y el otro todavía no se ha estrenado.
Benítez es Ferris Bueller y esperemos que haga bailar al celtismo al ritmo del Twist and shout. Aunque sea playback, lo importante es ganar.