Patronal, CIG y UGT han firmado el nuevo convenio del metal este viernes en Vigo
Los representantes del sindicato CCOO votaron en contra del preacuerdo, por lo que el convenio sale adelante sin su firma
Imagen de archivo de las negociaciones entre la patronal y los sindicatos del sector del metal en el Hotel Coia de Vigo / Nicolás Domínguez (Iniciativas Audiovisuales de Vigo)
Este viernes 4 de agosto, las asociaciones empresariales ASIME, Atra e Instaelectra han firmado el convenio colectivo del sector del metal para la provincia de Pontevedra, con la firma de los sindicatos UGT y CIG. Este convenio aplica desde el 1 de enero de este año hasta el 31 de diciembre de 2025.
Más información
ASIME, en un comunicado, destaca que en esta revisión del convenio se aplica un incremento salarial total del 9%, un 3% en cada uno de los años de aplicación, con hasta un máximo de 2% adicional anual si el IPC estuviese por encima de la subida acordada. Esta revisión da de plazo a las empresas hasta el próximo 31 de octubre para el pago de los atrasos acumulados en este 2023.
Además, desde la Patronal señalan la reducción de la jornada laboral anual en 16 horas, 8 en 2024 y 8 en 2025, además de añadir un día adicional de vacaciones, que se suma a los 23 días hábiles. En un comunicado enviado a los medios, recogen además que las contrataciones que se hagan por picos de trabajo puntuales tendrán una duración de hasta 12 meses, no de 6 como hasta la fecha.
A nivel salarial, señalan el compromiso de ambas partes para establecer un umbral salarial en los contratos formativos, que será de lo correspondiente al SMI para los de obtención de la práctica profesional y del SMI +10% en el segundo año para los de formación en alternancia o FP dual.
Valoración de la Patronal sobre el nuevo convenio
La Patronal en su comunicado valora este acuerdo diciendo que “después de tanto sufrimiento y de hechos conflictivos que han sucedido durante los días de huelga, especialmente la actuación violenta de piquetes en empresas y los actos vandálicos sucedidos en los alrededores del IFEVI, finalmente se ha llegado a un buen acuerdo para trabajadores y empresarios, teniendo en cuenta que, para la parte empresarial, el mayor valor en la negociación colectiva siempre es esa paz social y diálogo tranquilo, una calma imprescindible para poder ser competitivos en un entorno como el actual, no solo a nivel nacional sino también internacional, entorno en el que hay una competencia feroz. Hay que ser rigurosos e intentar siempre contar con un marco laboral competitivo que garantice la consecución de pedidos y la carga de trabajo para el sector”.
