Días de surf, noches en el bosque: así brilla Ortegal en Semana Santa
Visitamos Ortegal Surf Escola y Naterra Lodge con Pablo Maciñeira, su impulsor
Ortigueira
"El invierno gallego también merece la pena", pero quien ha cabalgado olas por medio mundo sabe que en Canarias tampoco se "está mal" antes de la primavera, así que Pablo Maciñeira (Ortigueira, 1991) regresó hace pocos días a la comarca de Ortegal, paraíso enemistado con la masificación turística.
Es la cara visible de dos proyectos afianzados en su propuesta lenta, de "experiencia diferenciadora", y poco antes de que empezase la Semana Santa, el pistoletazo de salida de cada año para el ocio al aire libre, se entrega a la tarea de "lavarle la cara" a Ortegal Surf Escola y Naterra Lodge, las dos iniciativas que abandera en Ortigueira.
Las labores de mantenimiento han permitido la apertura de cara a unas jornadas que son de vacaciones para muchas personas y en las que la meteorología, admite, es la que decide: "Cuando la temporada se acerca, evitamos que nos pille el toro, pero la Semana Santa es un gran depende; estamos a merced del tiempo que va a hacer".
"La semana anterior llueven reservas y llamadas o se cancela alguna; hay que informarse mejor, la gente coge el móvil, mira y siempre ve la nube y no es la realidad", cuenta con una sonrisa, para estimar que Ortegal "es una comarca muy peculiar", dotada de un particular microclima, así que hay que saber "interpretar la previsión del tiempo".
En el caso de Ortegal Surf Escola, Maciñeira habla de "un perfil muy variopinto", con familias como protagonistas "en temporada alta; la mayoría, de Madrid", aunque tras la crisis sanitaria de los tres últimos años ha repuntado el usuario del extranjero. Por más que la guerra en Ucrania o la subida de precios alarmen, lanza otro mensaje, "somos positivos, nos va a ir bien seguro".
Reivindica su modelo de "servicio en partes", tanto una escuela de pádel surf y surf como su área de alquiler de material o la "pequeña tienda" como "referencia" en el puerto ortegano de Espasante. "Vendemos material, como camisetas, sudaderas o ponchos, y material técnico para gente que está por la zona a la que se le rompe un invento o necesita parafina", reseña Pablo Maciñeira.
Impulsa "una experiencia para un perfil con un nivel bajo", un cliente que no "ha descubierto el deporte" y se sumerge en su primera aventura. También hay gente que repite "desde hace años y está en niveles más avanzados, ya coge olas de forma autónoma"; en esos casos, "los vamos guiando para que la práctica sea segura, respetuosa e independiente y nos recomienden a otros amigos".
Más reciente es su proyecto de Naterra Lodge, un alojamiento enmarcado en la corriente del glamping, cada vez más asentada, que está en el mismo municipio de Ortigueira, pero lejos de aquellas olas y en el corazón del núcleo rural de Couzadoiro. "Estamos rodeados de un bosque de castaños con unas vistas espectaculares, no nos motivaba la típica habitación de hotel", indica Maciñeira.
Una iniciativa en la que va de la mano de su socio, Arturo Sánchez. Lo tuvieron claro, pleno "contacto con la naturaleza" y con un "acceso que ya es peculiar, es una cuesta arriba un poquito empinada y muy tupida por la vegetación"; merece la pena por lo que se contempla al acabarla: "Si llegas al atardecer, se hace de noche y ves las vistas del valle, la ría de Ortigueira y la sierra de A Capelada".
Un anochecer "único" y una "experiencia diferenciadora; lo somos, el glamping lo es porque te da contacto con la naturaleza" gracias a "tiendas tipo safari", toda una novedad en una comarca de paisaje salvaje y a la que hay que desembocar por vocación, no hay una gran autopista que invite a llegar por azar.
"Ortegal va lentamente a más, tiene mucho margen de mejora; necesita ser redescubierta, todo el mundo la conoce y cada vez que viene se sorprende", apostilla, por lo que emite su petición: "Necesitamos embajadores que trasladen a sus amigos que merece mucho la pena".
Raúl Salgado
Redactor de Radio Ferrol Cadena SER, nos escuchamos en Hoy por Hoy y SER Deportivos