Robo masivo de plantones de cerezo en una finca de El Torno
Las pérdidas económicas ascienden a 2.000€
Cerezos del Valle del Jerte. / Isabel Bolaños
Entrevista a María José Cobos, afectada por el robo masivo de cerezos en el Valle del Jerte. Hoy por Hoy Norte de Extremadura.
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Plasencia
Un robo inusual que ha conmocionado a la localidad de El Torno este pasado fin de semana. Ocurrió en la madrugada del sábado al domingo, cuando más de 350 plantones de cerezo de la variedad colt desaparecieron de una finca ubicada en la localidad, dejando un grave perjuicio para su propietaria, María José Cobos, quien ya ha denunciado los hechos ante la Guardia Civil.
Según ha explicado la agricultora afectada, los plantones habían sido sembrados hacía apenas 10 días como parte de un proceso de renovación de la finca, que abarca aproximadamente 4.000 metros cuadrados. “El sábado estuvimos trabajando hasta las 3 de la tarde, y el domingo por la mañana, cuando volvimos, ya no estaban los plantones. Se los habían llevado todos”, relató Cobos.
Un robo sin precedentes
El terreno quedó como si nunca hubiese sido sembrado, lo que hace sospechar que los ladrones actuaron de manera organizada y planificada. Según la propietaria, es improbable que haya sido obra de una sola persona: “Tienen que haber sido al menos tres o cuatro, como mínimo”.
Además, el daño económico es significativo, con pérdidas estimadas en más de 2.000 euros, entre el valor de los plantones y los gastos derivados de su replantación. Los plantones robados, de la variedad "colt", son especialmente escasos en esta época del año por su disponibilidad en el mercado por estas fechas, lo que dificulta aún más la posibilidad de reponerlos.
Investigación en marcha
La Guardia Civil ya ha iniciado una investigación y ha recogido pruebas en el lugar, como huellas de botas y neumáticos. Según el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), este robo destaca por su magnitud, ya que es raro que se sustraigan cantidades tan grandes de una sola vez.
“Es mucha rabia. Te pasas semanas trabajando para que en una noche te lo destrocen todo”, lamentó la dueña, quien también expresó su impotencia ante la dificultad de identificar a los responsables. Aunque los plantones no están marcados, la propietaria no descarta que puedan aparecer en el mercado negro.
Un año perdido para la producción
Más allá del impacto económico inmediato, el robo implica un retraso significativo en la producción de la finca. Los cerezos tardan entre cuatro y cinco años en empezar a dar fruto, por lo que este hurto deja a la agricultora con un año perdido en su planificación.
María José agradeció el apoyo recibido de la comunidad y de la Guardia Civil, y lanzó un llamamiento para que cualquier persona que haya visto algo sospechoso esa noche lo comunique a las autoridades. Según vecinos, los perros de una finca cercana ladraron intensamente entre las 12 y las 3 de la madrugada, lo que podría dar una pista sobre el horario exacto del robo.
Un problema que afecta al sector
Aunque los hurtos menores son relativamente comunes en la región, un robo de esta magnitud es algo sin precedentes en la zona. Este incidente subraya la vulnerabilidad de los agricultores, quienes invierten esfuerzo y recursos en sus tierras para que en pocas horas puedan perder el fruto de su trabajo.
