"‘No podemos permitir que se criminalice a los usuarios": Javier Blas exige mejores condiciones para los educadores sociales tras el asesinato en Badajoz

Bilbao

Los educadores sociales salen a las calles de las tres capitales vascas (Bilbao, Vitoria y Donostia) para protestar tras el asesinato de una compañera en Badajoz. Belén Cortés Flor, una educadora social, fue asesinada presuntamente por dos menores en un piso tutelado, un hecho que ha desencadenado una ola de movilizaciones para exigir mejores condiciones laborales y mayor seguridad en el desempeño de su trabajo.

Las movilizaciones en Euskadi

Javier Blas, responsable del sector de educadores sociales en Comisiones Obreras Euskadi, ha explicado en una entrevista en Hora 14 Euskadi que las concentraciones buscan visibilizar las precarias condiciones en las que trabajan estos profesionales. "Se ha dado una situación lo suficientemente grave como para salir a la calle y que el resto de la sociedad sea consciente de en qué condiciones estamos trabajando", afirmó Blas.

Las protestas, que tuvieron lugar a las 6 de la tarde en las tres capitales vascas, tienen como objetivo presionar a las instituciones para que mejoren las condiciones laborales de los educadores sociales y eviten que hechos como el ocurrido en Badajoz se repitan.

Falta de seguridad y recursos

Blas ha denunciado la falta de recursos y seguridad en el trabajo de los educadores sociales. "Nos parece importante que las instituciones sean conocedoras de la forma en la que se está trabajando", señaló. Además, ha criticado que, en muchas ocasiones, los profesionales se ven obligados a trabajar en condiciones inseguras, con ratios inadecuadas y sin el apoyo necesario.

El responsable de Comisiones Obreras también ha destacado la importancia de no criminalizar a los usuarios de estos servicios. "Siempre se acaba criminalizando a los usuarios, pero nosotros creemos que hay que empezar por garantizar condiciones dignas para los trabajadores", afirmó.

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Asesinato en Badajoz

El asesinato de Belén Cortés Flor, una educadora social de Badajoz, ha conmocionado al sector. Cortés Flor fue atacada presuntamente por dos menores en un piso tutelado, un hecho que ha puesto en evidencia los riesgos a los que se enfrentan estos profesionales.

El Colegio de Educadoras y Educadores Sociales del País Vasco (GHEE CEESPV) ha expresado su "profunda consternación y solidaridad" con la familia de la víctima y ha advertido de que hechos similares "podrían ocurrir en Euskadi". Según el colegio, las denuncias por agresiones a educadores sociales han aumentado significativamente desde 2015.

Demandas del sector

Los educadores sociales exigen a las administraciones y entidades gestoras una serie de medidas para mejorar su seguridad y condiciones laborales. Entre las demandas se incluyen:

• Protocolos de seguridad: Establecer medidas claras para proteger a los trabajadores en situaciones de riesgo.
• Ratios adecuadas: Garantizar que los profesionales no tengan que atender a un número excesivo de usuarios.
• Supervisión y apoyo: Proporcionar supervisión y recursos técnicos y económicos adecuados.
• Dignidad laboral: Mejorar las condiciones laborales para evitar la precariedad en el sector.

Concentraciones en Euskadi

Además de las movilizaciones en las tres capitales vascas, el Colegio de Educadoras y Educadores Sociales ha convocado concentraciones en Bilbao y Vitoria para rendir homenaje a Belén Cortés Flor y visibilizar la repulsa ante su muerte. "No podemos permitir que la tragedia de Badajoz se repita", han afirmado desde el colegio.