Nekane Murga: "Ojalá hubiera tenido una bola de cristal, mis recomendaciones hubieran sido otras"
La consejera de salud en los momentos iniciales de la pandemia, Nekane Murga, recuerda en H-14 Euskadi cómo se vivieron los días de los primeros contagios en Euskadi y las decisiones que hubo que tomar sin apenas información sobre el virus
Entrevista a Nekane Murga en H-14 Euskadi
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Cuando el COVID-19 comenzó a propagarse por Europa a principios de 2020, el sistema sanitario vasco, al igual que el resto de las comunidades autónomas, se enfrentó a una crisis sin precedentes. Murga, que estuvo al frente del Departamento de Salud entre 2016 y 2020, fue una de las figuras clave durante la crisis sanitaria. Durante su mandato, las autoridades tuvieron que adaptarse a la rapidez de la evolución del virus, sin contar con el conocimiento y los datos que hoy en día se tienen sobre su comportamiento.
En sus declaraciones, Murga ha reflexionado sobre las decisiones tomadas en esos momentos: "Habría aspectos que claramente hubiera estado preparada de manera diferente". Con esta frase, la exconsejera ha hablado de la dificultad de tomar decisiones en un contexto de incertidumbre, donde el conocimiento sobre el virus estaba en constante cambio.
Impacto del COVID-19 en Euskadi
Desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020, la comunidad ha registrado más de 370.000 contagios confirmados de COVID-19. A lo largo de los años de pandemia, el virus dejó una profunda huella, con un total de 7.500 fallecidos en la Comunidad Autónoma Vasca debido al virus.
En los primeros meses, la tasa de contagios aumentó rápidamente, lo que llevó a las autoridades a implementar medidas restrictivas, como el confinamiento total y la limitación de la movilidad. Por ello Murga ha destacado la importancia de la coordinación del Gobierno Vasco y la toma de decisiones en cuanto a las restricciones se refiere.
En abril de 2020, la CAV experimentó uno de los momentos más críticos, un fuerte aumento en los casos positivos y una presión sin precedentes sobre los hospitales. El número de personas infectadas comenzó a dispararse, alcanzando más de 12.000 casos confirmados a mediados de abril.
Los primeros casos de COVID-19 en Euskadi
El primer caso confirmado de COVID-19 en Euskadi se registró a finales de febrero de 2020, cuando un hombre de 51 años, residente en Vitoria, fue diagnosticado con el virus tras haber regresado de un viaje a Italia, uno de los países más afectados por la pandemia en ese momento. Este caso marcó el inicio de una serie de contagios en la comunidad, que rápidamente se fue extendiendo por diferentes localidades del País Vasco.
El primer brote importante también se detectó en Vitoria a principios de marzo, con varios casos relacionados con un evento social que se celebró en un hotel de la ciudad. Este brote fue uno de los primeros en dar la alarma sobre la rápida propagación del virus en la región. A medida que se fueron realizando más pruebas y se detectaron nuevos contagios, las autoridades comenzaron a tomar medidas más estrictas.
