"Yo le veo a la IA muchas oportunidades, el problema es cómo la utilicemos"

Vitoria-Gasteiz

La Inteligencia Arificial ha llegado para quedarse y, además está avanzando a toda velocidad; lo que parecía que iba a desarrollar en años se está acelerando mucho, así que la brecha digital cada vez se está haciendo más grande a todos los niveles de la sociedad, más si cabe cuando hablamos de nuestros mayores. En 'Hoy por Hoy Vitoria' hemos querido conocer cómo ven la llegada de las IAs, con sus oportunidades y riesgos, las personas más mayores y, además, nos hemos acercado a dos organismos que ofrecen formación para saltar esa brecha digital

Los KZguneas son los espacios públicos con los que contamos en Euskadi para poder adquirir conocimientos en el ámbito digital. "Tenemos 230 centros en todo Euskadi, casi todo el mundo tiene un KZgunea cerquita de su casa", señala Cristina Espada, Coordinadora de centros en Álava. "Ofrecemos formaciones con las cuestiones más básicas, como aprender a mandar un email, hasta las más complejas como Cyberseguridad o Inteligencia Artificial", señala. Preguntada por el perfil de los usuarios de los cursos exclusivamente de IA y que empezaron a ofrecerse este mismo año, Espada a apunta que "en este tiempo hemos formado en estos temas a 403 personas con una media de edad de 62 años".

SIRI o Roomba

María García es educadora en los centros de Hegoalde, en Vitoria, y Agurain. "Va todo muy rápido y a la gente no le da tiempo a ponerse al día", nos cuenta. "Una de las cuestiones que le explicamos a las personas que vienen as los cursos es que ya hay IA en nuestro día a día, por ejemplo, SIRI u otros asistentes de voz", explica. En el curso sobre IA que se ofrecen en estos puntos de formación, además de conocer las herramientas y sus usos, se abordan también herramientas para detectar los bulos o noticias falsas. "Uno de los consejos que damos es mirar la URL y ver si este la 's' que marca la seguridad del sitio desde el que se ha emitido", cuenta.

Elena está encantada con las posibilidades que ofrece la IA. Esta mujer de 66 años y que está a punto de jubilarse, es una de las usuarias que se han animado a hacer la formación sobre Inteligencia Artificial. "Tenía que vender una lonja y no sabía cómo y la pregunté al ChatGpt cómo hacer un anuncio y me buscó los puntos fuertes de la zona, por ejemplo, y el anuncio fue impactante", nos ha contado.

La IA y la brecha digital en los BIZAN

Los centros Bizan llevan años luchando para ayudar a que nuestros mayores no se queden atrás, en una sociedad cada vez más digitalizada con incursión, los últimos años, de la Inteligencia Artificial. Por ello se han puesto manos a la obra para dotarles de las herramientas necesarias, para poder "en primer lugar conocerlas, porque no solo nos centramos en explicarles Chat GPT sino que también hablamos de Gemini, que tiene una mejor y mayor empleabilidad ya que está conectada a internet, y luego aprender a usarla de la mejor manera posible y siempre en el bien y para ayudar en las funciones que hagan en el día a día de cada uno", nos contaba Aitor Hermosilla, encargado de impartir los cursos sobre IA.

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Hermosilla nos contaba que lo que quieren conseguir con el curso 'Abusos prácticos de IA' es ofrecer a los usuarios "todas las posibilidades y beneficios que podemos tener con su uso y por el otro lado alertarles de los riesgos, que en su mayoría pasan por la generación de fake news y quitarles lo miedos e inquietudes que pueda generar a priori". Desconfianza que nos han contando Ricardo Martínez, Mavi Apellaniz y Luis Centeno, usuarios que ya han realizado el curso de la mano de los Bizan. Todos ellos coincidían que "aunque al principio éramos reticentes a usarla, después del curso le estamos viendo más beneficios que cosas malas, además es que es el futuro y no queremos que nos pille la brecha digital".

¿Tiene límites morales la IA?

Como estamos viendo la IA está evolucionando muchísimo y muy rápido, pero ¿Dónde están los límites? Porque sí que se está desarrollando normativa, sobre todo si hablamos de la Inteligencia Artifical Generativa, que está llevando a problemas de propiedad intelectual de algunas de las imágenes de artistas y creativos, pero ya la propia IA tiene unos límites  a la hora de ofrecer información de temas como el asesinato, terrorismo, agresiones, etc.

Situaciones que ha comprobado Jesús Grisaleña, que buscando esos límites morales, "le pedí que me contase chistes verdes de médicos, a lo que me contexto que prefería mantener la conversación en un tono respetuoso y apropiado para todos los públicos". Sin embargo, Grisaleña no se quedó ahí y quiso dar un paso más para ver si se había tratado de un pequeño cortafuego, y "le pedí la manera de acabar con mí vecino porque tenía un perro que me molestaba mucho a la hora de dormir, a lo que fue aún más contundente y con un mensaje en rojo me dijo que había infringido los términos y condiciones y no estaba autorizada para ayudarme". Todo esto marca que la IA sí que cuenta con límites morales y no es capaz de captar la ironía en las voces de los usuarios, característica intrínsicamente humana.