Nueva condena para el cura y exvicario de Uribe Kosta que abusó de varias monitoras eskaut

Bilbao

El periplo judicial comenzó en 2018 cuando la propia Diócesis de Bilbao llevó ante la Fiscalía a su entonces vicario de Uribe Kosta por varias acusaciones de delitos sexuales entre cuatro monitoras de un grupo eskaut en Mungia. Para las víctimas, todo comenzó bastante antes, ya que los hechos denunciados ocurrieron entre 2015 y 2017 en varios campamentos. Tras seis años de recorrido y varias sentencias, el Juzgado de lo Penal de Burgos ha impuesto una multa durante 18 meses con una cuota diaria de ocho euros por cada uno de los dos últimos delitos pendientes de resolución.

Además, la Justicia impone al condenado la obligación de indemnizar a las víctimas la cuantía de 3.000 euros en un caso y de 1.000 euros en otro, en concepto de responsabilidad civil. También la prohibición de comunicarse o acercarse a ellas a menos de 500 metros durante poco más de tres años. Las costas procesales, incluidas las de la acusación particular, tendrá que abonarlas el condenado. Por su parte, las víctimas han retirado la petición de responsabilidad subsidiaria al Obispado bilbaino.

Hay más casos

Esta es la sentencia de los últimos casos de abuso sexual pendientes de juzgar. La Audiencia de Bizkaia le absolvió del primero de los casos, fechado en 2015, por falta de pruebas, según dicta el auto al que tuvo acceso Radio Bilbao y confirmaba lo que estableció un primer tribunal. Sin embargo, ante unos hechos similares, ocurridos en Burgos, la Audiencia de esta provincia ratificaba también la sentencia de primera instancia que le condenó al sacerdote a 14 meses de cárcel por unos abusos sexuales que cometió a dos chicas en los campamentos. En este caso, el condenado no recurrió el auto y, finalmente, fue suspendido por una acuerdo entre ambas partes.

Ya en su momento el miembro de la asociación Infancia Robada, Juan Cuatrecasas, señalaba a la SER que "mientras no haya un modelo a seguir que sea igual en todos los sitios de este país, seguirá habiendo casos de absoluta negligencia. Cuando se niegan los derechos a una víctima, se le está revictimizando", en referencia a unos mismos hechos parecidos en el mismo contexto y dos sentencias apuestas.

Protección a las víctimas

La nota de la Diócesis de Bilbao remitida a Radio Bilbao "muestra, una vez más, su solidaridad y junto a la federación de eskauts de Bizkaia mantiene su apoyo constante a las víctimas escuchándolas, investigando, reparando y, sobre todo, procurando sanar las heridas". Añade que esto será siempre, "independientemente del momento en el que se hayan producido" estos abusos.

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Por su parte, Euskalerriko Eskautak Bizkaia condena en un comunicado "de manera firme cualquier comportamiento contra la libertad sexual de las personas" y subraya "su compromiso de apoyo y solidaridad con las víctimas que, además de las agresiones sufridas, se han tenido que enfrentar, junto a sus familias, a un proceso judicial tremendamente largo y duro".