Igualdad y videojuegos, dos nuevas posibilidades de aprendizaje en Egibide

Vitoria-Gasteiz

Nekane trabaja de cara al público y quería mejorar su atención y "la interacción con sus compañeros y compañeras". Así que decidió apuntarse al Ciclo de Grado Superior de Promoción de Igualdad que ha arrancado este año en Egibide. Ella dice que la formación le está ayudando a "desempañar" la visión sobre la sociedad y ser más consciente de las desigualdades que se dan. "En todos los barrios, por ejemplo, hay un campo de fútbol, porque el urbanismo se hace para los hombres", nos dice, "antes lo veía como algo normal y ahora me doy cuenta de esas cosas", señala. "Se trata de empezar a ver, darnos cuenta y aprestar atención", nos cuenta Garazi, otra de las alumnas del ciclo que, viene del ámbito sanitario, y ha querido completar su formación con "algo más social". "Me enteré del ciclo de chiripa y me apunté", nos cuenta. Son dos de las alumnas- todas mujeres, por cierto- de este ciclo que se puede estudiar, por primera vez, este curso.

"El tema de la igualdad es una inquietud que siempre ha estado presente en Egibide pero ahora social y legalmente se está abriendo una nueva puerta para una figura más profesionalizante", nos cuenta Ane Fernández de Larrea, coordinadora del Grado que, asegura, que es una formación con muchas salidas laborales.

Videojuegos y Realidad Virtual

Otro de los nuevos grados, de especialización, que se puso en marcha el año pasado en Egibide fue el curso de "Desarrollo de Videojuegos y Realidad Virtual". Un sector en auge y con demanda en el mercado laboral, es por ello que desde el centro alavés se han lanzado a proporcionar las herramientas necesarias a los alumnos y alumnas para que lleguen lo mejor preparados posible. Gaizka Bertol, tutor del curso nos contaba como "estoy muy contento con todo lo que hemos podido hacer y avanzar con la primera promoción, de hecho la parte más complicada fue la organización y llegar a un acuerdo del videojuego que queríamos crear como trabajo final". Esta primera promoción ha contado con 7 alumnos y un trabajo final en forma del videojuego 'Seed of Faith', basado en la mitología vasca.

Bertol nos destacaba como "los videojuegos son la máxima expresión del arte audiovisual, porque además de tener todo lo que tienen las películas tiene la capa de interactividad y se necesita aprender todas las técnicas que se han desarrollado hasta ahora más allá de la programación". Alejandro López de Guereñu, participante en esta primera promoción nos contaba como "todo lo aprendido me está sirviendo en el nuevo proyecto que estoy haciendo con la universidad de Mondragón, con una programa interactivo de preguntas y respuestas para aprender mientras se juega".

Además, dos de los cursos que más demanda tienen en el mercado laboral, y para los que se necesitan nuevos alumnos y alumnas, en palabras del director de Formación Profesional, Diego Abellán "son los relacionados con la industria y la hostelería, ya que son muchas las empresas que nos llaman demandando estos perfiles profesionales, así que animamos a que la gente se apunte, porque entre la formación que les proporcionamos y las prácticas en empresas están muy bien preparados para el mercado laboral o incluso lanzarse a emprender".

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Una realidad gracias a empresas como Burdinberri y Sukalki-Plágaro Taberna, donde Alejandro Castillo está haciendo las prácticas junto a Luis Ángel Plágaro, y reconoce que "es una muy buena experiencia y oportunidad de crecer y entrar en el mercado laboral, además esto me ha ayudado a decidirme a que me quiero dedicar a esto en el futuro".

El valor de la interculturalidad

Todo el aprendizaje se hace, además, bajo la metodología de Egibide en la que se busca "formar personas", señala Cristina Pena, directora Egibide. De hecho, este año, se ha elegido un nuevo lema para el centro que destaca esto: 'Aprender algo más: más allá de lo académico'. "Nos referimos a todo lo que está más allá: valores, modo de relacionarse o modo de ver la vida", apunta Pena. "Ya hemos pasado del tiempo en el que solo se valora lo académico: queremos hacer buenos ciudadanos", señala. La nueva directora que destaca, además, la riqueza de la interculturalidad del centro. "Tenemos los ingredientes  para trabajar por una sociedad intercultural: hemos llegado a las 60 nacionalidades, tenemos un laboratorio social interesante", destaca.

Emprender

Emprender es otra de las opciones para quienes se forman en Egibide, de hecho, ya se hace un trabajo por proyectos que favorece, el acompañamiento a la hora de poder poner el germen del emprendimiento en los alumnos y alumnas a través de diferentes asignaturas y experiencias que se aportan en el centro, el emprendimiento que está presente en las aulas.

Ahí es donde se lanzó Alba Cáceres con la puesta en marcha de su empresa AKA-Ortesis Prótesis. Proyecto que como ella misma nos cuenta "lo puse en marcha tras volver de Alemania, donde tuve que pasar la pandemia, y mientras decidía que quería ser madre". Todo un reto "del que me siento muy orgullosa y contenta con los resultados", indicaba Alba, en ese proceso de dar orgullo a todos y cada una de las personas que ayuda con la creación de prótesis y en el proceso de acompañamiento en la recuperación.