Osakidetza a examen. Opinan los exconsejeros Nekane Murga y Rafa Bengoa

Vitoria-Gasteiz

Si tuviésemos que elegir un problema, una preocupación ascendente en Euskadi, algo que no entraba en los cálculos de nuestros dirigentes hace ahora 4 años, todos coincidiríamos en Osakidetza. De joya de la corona a quebradero de cabeza del Gobierno vasco. Pandemia del COVID-19 mediante. La crisis de confianza que atraviesa la Sanidad pública vasca le ha aupado al segundo puesto en las preocupaciones de la ciudadanía y en uno de los temas estrellas de la precampaña electoral vasca. En 'La ventana Euskadi' hemos citado a los exconsejeros del ramo Rafael Bengoa y Nekane Murga para que nos hagan su diagnóstico de la Sanidad pública vasca y aporten soluciones de cara a la siguiente legislatura.

Nekane Murga

Nekane Murga tuvo que lidiar con lo más duro de la pandemia durante su mandado como consejera de Salud. Para ella, Osakidetza sigue teniendo fortalezas. una atención de gran calidad y profesionales de gran capacidad. Pero reconoce que hay aspectos que perciben los ciudadanos como las listas de espera o la atención ciudadana que están generando esa falta de confianza y preocupación en la ciudadanía. Para Murga, por lo tanto, el principal reto de Osakidetza, es "mantener la confianza que ha tenido siempre de la población". Otros retos de la Sanidad pública vasca son, a su juicio, reducir las listas de espera, incorporar nuevos profesionales y reducir la burocracia....Lo primero que haría sería "buscar la opinión de los profesionales y de la ciudadanía para trabajar en los aspectos que están creando la desconfianza. Y cuidar la atención primara y hacerla más inmediata".

Rafa Bengoa

Rafa Bengoa coincide en la inseguridad y falta de confianza de la gente en la sanidad pública vasca. "Da la sensación de una especie de erosión y la gente quiere recuperar esa sensación de seguridad" anterior. Entre las razones, Bengoa apunta a "una demanda absolutamente explosiva y esa demanda se nota en el crecimiento de las hospitalizaciones, visitas a Urgencias, Atención Primaria...y por exceso de volumen da la sensación de que el sistema no puede con ello", explica. Sin embargo, asegura que "podemos organizar las cosas para que haya Osakidetza para otros 40 años". Bengoa quiere buscar soluciones y no profundizar en la crisis. Niega que, como se proclama en las manifestaciones, se está privatizando Osakidetza, o que no se haya invertido... Como soluciones, "lo primero es aceptar que hay una crisis por todos los partidos políticos y que Osakidetza es un problema que tienen todos esté quien esté en el próximo gobierno vasco. Sobre esa base, lo que conviene es que se siente todo el mundo y decidir soluciones". En su opinión, habría que contratar más profesionales en especialidades donde falta gente, introducir un modelo que no esté intentando hacer todo en Urgencias y hospitales, esto es, apostar más por la Atención Primaria y a domicilio controlando a los pacientes a distancia. Añade también, como Murga, la necesidad de reducir la burocracia, para lo que puede ayudar la Inteligencia Artificial. Y por último, "Osakidetza no se arregla si no arreglamos la trayectoria de la enfermedad con los servicios sociales", concluye.