Los estudios sobre el soterramiento del tren en Vitoria prevén ruidos y vibraciones “por encima de los límites autorizados por la ley”
La declaración de impacto ambiental incluye pantallas de cuatro metros para reducir el ruido y se hará un seguimiento de “posibles grietas” en los edificios
Vitoria-Gasteiz
El proyecto para la llegada del Tren de Alta Velocidad (TAV) y el soterramiento de las vías en parte de Vitoria-Gasteiz ya tiene luz verde ambiental por parte del Ministerio para la Transición Ecológica. Este viernes el BOE ha publicado la declaración de impacto ambiental que recoge las medidas que tendrán que adoptarse para mitigar los efectos que esta nueva infraestructura va a tener en la ciudad. Y no son pocas, en especial, los problemas de ruidos y vibraciones que superarán los límites que establece la normativa y, para evitarlo, la declaración ambiental propone una serie de medidas.
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Sobre el ruido, el Ministerio para la Transición Ecológica prevé “una superación de los valores” que establece la ley en la parte del recorrido entre la entrada por Zabalgana y la salida por Salburua. El tren de alta velocidad no estará soterrado en Zabalgana ni tampoco en Salburua entre la calle Bulevar de Salburua y Arkaiate.
El Ministerio toma como referencia dos indicadores diferentes: los valores límites de inmisión (VLIs) y los objetivos de calidad acústica (OCAs). En el caso de los VLIs hay 19 edificios de viviendas y 2 centros educativos por encima de los límites de ruido además de otras 5 edificaciones que se están desarrollando. Respecto a los OCAs son 12 edificios de viviendas, 5 nuevos edificios en construcción y 2 centros educativos los afectados.
Pantallas para reducir el ruido
La declaración de impacto ambiental valora como “moderado” el incremento del ruido como consecuencia del tráfico de trenes y propone instalar 18 pantallas acústicas metálicas “de doble absorción”, 12 de ellas en el trazado no soterrado de Vitoria y seis en el nudo de Arkaute. “Con estos apantallamientos propuestos el promotor garantiza el cumplimiento de la legislación de aplicación en el ámbito de estudio y para una altura relativa de 4 metros respecto al terreno”, explica la declaración ambiental.
Respecto a estas pantallas, el departamento de Transporte del Gobierno vasco, considera que las medidas que se adopten deben estar dirigidas a reducir el ruido en todas las plantas de los edificios residenciales y pide que se tengan en cuenta las parcelas urbanizadas en las que todavía no se han levantado los edificios previstos. Al Gobierno vasco le preocupa también el impacto visual de esas pantallas y pone el acento en el efecto túnel que se puede producir a la entrada y salida del falso túnel: pide que “se propongan las medidas necesarias para mitigar su efecto”. El Ministerios de Transportes ha respondido que estas cuestiones se tratarán más adelante.
La declaración de impacto ambiental anuncia un nuevo estudio acústico para analizar el ruido “durante cualquier periodo y a cualquier altura de medición” en las viviendas y edificios del entorno del tren. Este estudio, que se incluirá en el proyecto constructivo, deberá contar con el informe favorable de la Dirección de Salud Pública y Adicciones del Gobierno Vasco. El Ministerio de Transición Ecológica señala que tendrán que tomarse las medidas necesarias para cumplir la legislación en cuanto a los límites de ruido.
Seguimiento de la “aparición de posibles grietas” por las vibraciones
El documento hecho público este viernes señala que se ha realizado un estudio sobre las vibraciones que provocará el paso soterrado del tren por Vitoria y la conclusión es que las vibraciones superarán los límites establecidos por la normativa. “El incremento de los niveles vibratorios, según las distancias a las que se encuentran los edificios de uso residencial, sanitario y de uso educativo o cultural se prevé que se encuentren por encima de los límites autorizados por la legislación aplicable”.
“El impacto se valora como severo”, señala la declaración de impacto ambiental.
El Ministerio para la Transición Ecológica incorpora el uso de “mantas antivibratorias” en seis tramos del trazado “para cumplir con la legislación vigente” con una longitud total de 1.480 metros. “Esta medida se detallará y corroborará en los correspondientes proyectos constructivos que se desarrollen”.
Además, la declaración de impacto ambiental incluye un seguimiento de las medidas antirruido y antivibraciones finalmente adoptadas, “mediante mediciones in situ y el seguimiento de la aparición de posibles grietas en edificaciones próximas”.
Iker Armentia
Edito Hora 14 Vitoria y los informativos de la mañana de Hoy por Hoy Vitoria. Pendiente de la actualidad...
