"Las víctimas de abusos sexuales en la infancia siguen sin recibir la ayuda necesaria. El caso de Escolapios es uno más que deja en evidencia un grave problema"

Bilbao

Tras la carta de disculpa del colegio Escolapios de Bilbao a dos víctimas de abusos sexuales cometidos en los años 70, en Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia hemos contado con el testimonio de Carmina Serrano, doctora en Psicología y experta en tratar a este tipo de víctimas. De hecho se ha hecho cargo de víctimas de otros centros escolares de órdenes religiosas como Salesianos. Serrano explica que el hecho de que los centros publiciten el "mea culpa" supone "un punto de reconocimiento, pero mientras no haya reparación, el nivel de daño que ha sufrido es de tal calibre que no le deja ni trabajar"

Añade que "el daño ha sido tal, porque no es lo mismo un abuso de un día que uno durante años, ya que el nivel de trauma que deja en tu psique es de un calibre muy grande". Por ello, cuenta el caso de algunos de sus pacientes para los que ha "intentado que se le sufrague ayudas como la RGI porque "muchos no pueden rehacer sus vidas".

Falta de ayudas

Pone el caso Serrano de las mujeres que reciben estos abusos, "cuando el daño es muy profundo, las ayudas que necesitas son más amplias, no solo que se reconozca el daño, también repararlo. En este caso de las mujeres, se les da un entorno seguro, una casa y a estas personas habría que darles lo mismo".

Añade que el camino recorrido por esta persona ha sido "muy complicado, porque en aquella época estábamos en el Franquismo y estos temas ni se nombraban ni existían, el camino fue que se lo guardó hasta que de mayor tiene un trastorno psíquico muy importante y es cuando aparece todo. Después de muchos procesos tuvo que ingresar por estos problemas".

Sobre cómo estos hechos afectan mentalmente a un niño o niña, incide en que "normalmente los abusadores lo hacen con criaturas dañadas, que tienen problemas en las familias, criaturas con necesidad de ser atendidos y cuidados. La familia de este hombre, no daba crédito". Añade precisamente que "ahora sabemos que el primer apoyo psicológico debe ser inmediato, que la familia pueda soportar la desestabilización de sacar esto a la luz para que se haga".

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"Hace falta que socialmente esto salga a la luz, que visibilicemos que esto existe, un 20% de la población mundial está sufriendo esto. Hace falta que socialmente acojamos este sufrimiento y afrontemos cómo darle salida", concluye Carmina Serrano.