Calor a 20 grados y aire a 25 en edificios públicos vascos para ahorrar energía
Las instituciones vascas han concretado varias medidas de eficiencia energética que se implementarán a partir de septiembre, entre ellas la regulación de la calefacción y el aire acondicionado en edificios públicos
Bilbao
Limitar la calefacción a 20 grados en invierno y el aire acondicionado a 25 en verano en los edificios dependientes de todas las administraciones públicas vascas es una de las medidas que han acordado implementar de manera conjunta a partir de septiembre el Gobierno Vasco, las diputaciones y Eudel.
Representantes de estas instituciones han mantenido una reunión este viernes en el seno del Grupo Institucional de Sostenibilidad Energética para preparar las medidas de eficiencia energética que les competen dentro del plan de contingencia anunciado por la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia, para administraciones, hogares y empresas de cara a hacer frente a la situación de "emergencia energética" provocada por la invasión rusa de Ucrania.
Tapia ha comparecido tras el encuentro para explicar que las instituciones vascas han concretado una serie de acciones en un borrador que se recogerán en una instrucción general cuya aprobación está prevista para el próximo 1 de septiembre.
Una de las principales medidas tiene que ver con la climatización de los edificios públicos, de manera que en invierno el termostato se regule a 20 grados, reduciendo esa temperatura a 15 grados por la noche y los fines de semana. En verano la temperatura debería ser de 25 grados.
En cuanto a la iluminación, el objetivo es la sustitución paulatina de todos los aparatos por bombillas led, el control de los horarios de encendido y el uso de sensores en pasillos y baños. Además, se insiste en que todos los equipos informáticos deben quedar apagados al acabar el horario laboral.
Tapia ha insistido en que no se trata de sancionar a las administraciones que no cumplan estas medidas, sino de que adquieran el compromiso de ir poniéndolas en marcha una vez que se apruebe la instrucción en septiembre, teniendo en cuenta las características de cada edificio, ya que no es lo mismo, un colegio, un hospital o una comisaría.