Nochebuena celeste anticipada

Vigo

El Celta se reencontró con el fútbol, con la victoria, con la alegría y con su público. Todo en 90 minutos de una gran superioridad y de un gran fútbol contra el Espanyol. Se enfrentaban el peor local contra el segundo peor visitante y podría haber sido una pesadilla antes de Navidad. Pero todo cambió en el minuto 2. El Espanyol esperaba encerrado atrás y el Celta elaboró una gran jugada que acaba con una doble pared Mina-Aspas-Mina para que el delantero no desaprovechó la ocasión de batir a Diego López en el mano a mano. Otro gol de Santi Mina y asistencia de Aspas que ya las echábamos de menos. Santi Mina sigue mejorando y mejorando sus números. El guión de Vicente Moreno se vino abajo y el Celta se encontraba por delante en el marcador.

Los celestes fueron capaces de llevar con relativa calma y solvencia futbolística toda la primera mitad hasta una pérdida absurda en el 43. Ese minuto que pudo ser dramático ya que concedió una contra de RDT, Melendo, Aleix Vidal con disparo de Puado que obligó a Dituro a hacer un paradón. Hace un mes ese disparo hubiese entrado. Pero hoy no era el día. Con el 1-0 al descanso se retiró Beltrán y entró Denis Suárez. Arriesgo Coudet dejando otra vez las tareas de destrucción a Tapia para que pudiesen asociarse arriba Cervi-Denis-Brais-Aspas y Mina. Y la segunda parte empezó como la primera.

Después de una gran jugada elaborada de izquierda a derecha, Aspas recibe dentro del área por la derecha, se perfiló para golpear con la zurda y batió a Diego López con una delicatessen. Era el 2-0. Resultado que ya casi no recordaban ni los más viejos del lugar. Estaba la Chachoneta más cerca de romper la racha de 83 días sin ganar en casa. Lejos de querer especular o de bajar revoluciones, el equipo nos recordó al del pasado año. Se quitó la tensión y la presión y se desabrochó el cinturón. Y fruto de ello llegaron numerosas llegadas pero sin precisión en la finalización. Hasta que una gran triangulación del equipo acabó con Aspas habilitando a Hugo Mallo que asiste a Denis que bate a Diego López con un toque magistral y sutil. El Celta ganaba 3-0 en casa. Decía Coudet que el equipo pagó una deuda que tenían con la afición. Y vaya si disfrutaron los casi 10.000 aficionados que fueron a Balaídos. Estaban tan a gustito, que diría Ortega Cano, que hasta aplaudieron el golazo de Loren Morón casi desde su campo.

Los de Coudet se ponen con 20 puntos a falta de un partido para acabar la primera vuelta. Lo más importante es que corta la sangría en Balaídos y, además, pone un colchón de 7 puntos con el descenso que lo marca el Cádiz que juega en el Bernabéu. Ahora no se le atragantará el panettone a la Chachoneta que puede disfrutar de una Navidad más que plácida. Y el Chacho podrá ir al supermercado más a menudo.