Osasuna salva un punto ante el Elche en el Sadar y gracias
La salida en tromba de los rojillos con gol de Budimir no fue suficiente, de nuevo a balón parado encajaba el empate y si no llega a ser por Sergio Herrera todavía el resultado pudo ser peor
Pamplona
Osasuna confirma ante el Elche que tiene un problema en el Sadar y otro a balón parado. Ya no sirve la excusa de las últimas jornadas del calendario, por medirse a los equipos de la zona alta porque enfrente estaba un equipo en puestos de descenso. Empate y gracias ante el Elche que disfrutó de las ocasiones más claras para llevarse el partido. Tres puntos sumados de los últimos dieciocho posibles es el bagaje de los seis partidos que encadena sin ganar. Eso sí, alcanza los veinte puntos, la mitad de la permanencia, con todavía cuatro partidos para terminar la primera vuelta.
Se le atragantan los partidos a Osasuna en el Sadar. Los rojillos son el quinto peor local de la liga. Solo una victoria en ocho partidos, con cuatro empates y tres derrotas. Siete puntos de veinticuatro posibles y eso que los grandes todavía no han pasado por Pamplona. De los de arriba, solo la Real Sociedad y el Betis han jugado y ganado por cierto en el Sadar.
Y eso que el inicio del partido ante el Elche pintaba bien. Salida en tromba de los rojillos arrollando a su rival con ocasiones claras en los primeros minutos para Kike García a centro de Cote y para Budimir que se estrellaba en el larguero. Precisamente en la continuación de esa acción, el árbitro decretaba penalti sobre Nacho Vidal que transformaba el propio Ante Budimir para estrenarse como goleador en esta liga. Y solo habían transcurrido seis minutos de la primera parte.
Del prometedor inicio a la preocupación. De nuevo a balón parado encajaba Osasuna. Un córner al primer palo era rematado solo por Fidel de cabeza para establecer la igualada. Y todavía pudo ser peor si no es por Sergio Herrera. El meta burgalés salvaba en el mano a mano ante Lucas Pérez que se había ido en el área de Unai García.
La segunda mitad comenzaba con otro susto para la parroquia rojilla. En la continuación de otro saque de esquina, Lucas Boyé se topaba con el poste en un remate claro dentro del área. No encontraba la fórmula Osasuna para hacerse con el control del partido y de nuevo providencial Sergio Herrera para evitar otra vez el 1-2. Un centro al segundo palo era rematado por Josan y el portero rojillo sacaba el balón casi en la misma línea de gol.
Solo en los minutos finales cuando el Elche parecía conformarse con el empate, recuperó Osasuna la iniciativa. Más con el corazón que con la cabeza, los rojillos comenzaron a meter más balones al área rival. En una de esas acciones un balón suelto dentro del área no supo aprovecharlo Kike García lento en la jugada que acabó estrellándose en la zaga ilicitana.
Al final un punto y gracias en el Sadar ante un rival directo como el Elche al que mantiene a ocho puntos de distancia. Osasuna consigue romper la racha la tres derrotas consecutivas pero amplía a seis las jornadas sin ganar. Se agudiza el problema del equipo como local donde no sabe ganar tampoco ante los de abajo y de nuevo concediendo goles a balón parado. Ahora llega la Copa del Rey el jueves ante el San Agustín de Guadalix, un equipo de regional en Madrid, con oportunidad para los menos habituales. Y el domingo visita a otro riva directo por la permanencia, el colista Levante que acaba de destituir a su segundo entrenador.