Cómo afecta el cambio de mentalidad del consumidor europeo al campo de la Región de Murcia

Murcia

Los consumidores europeos evolucionan hacia demandas de productos con menor huella ambiental. Y esto es lo que parece que acaba desencadenando en situaciones que afectan al campo de la Región de Murcia, una vez que Aldi ha pedido explicaciones a sus proveedores del Campo de Cartagena tras la crisis ambiental del Mar Menor y el impacto que está teniendo en este país reportajes como el emitido por la cadena de televisión WDR.

Éste ha sido uno de los temas de debate en 'El abierto' de Hoy por Hoy, con Ángels Barceló, donde Ignacio Escolar, Teodoro León Gross y José María Lasalle han analizado esta noticia y las derivadas que han llevado hasta ese punto.

Escolar ha recordado que esos cambios en la mentalidad de mercados como el de Alemania, uno de los principales destinos de los productos hortícolas de provincias como Murcia o Almería, ya llevaron a que en la zona productora del levante almeriense las empresas agrarias cambiaran por completo sus actuaciones en cuanto al uso de productos fitosanitarios o fertilizantes. "Ahora estamos una segunda vuelta", apunta Escolar: son los consumidores los que presionan a las grandes empresas para que controlen la huella ecológica de los productos que venden. "Nadie cuestiona la calidad de sus productos de la Región de Murcia", aclara también el colaborador. Y concluye: "Es buena noticia que los consumidores empiecen a presionar a las empresas para se hagan responsable de lo que venden. Y espero que en la Región de Murcia lo arreglen pronto".

"Los principales actores empresariales tienen muchos más parámetros que van más allá de la cuenta de resultados", señala por su parte Teodoro León Gross. "Me parece un toque de atención sano y positivo, pero tiene enormes riesgos y debería implicar al Gobierno central, no sólo al de la Región de Murcia". En este sentido advierte de que estas situaciones se pueden extender "como una mancha de aceite" y destruir la imagen de los productos que llegan desde el campo murciano a mercados no sólo como el de Alemania, sino a otros donde crece la cultura ecológica, ya sea Escandinavia o Francia.

Por su parte, José María Lasalle enmarca este cambio de actitud en una tendencia que espera que "ojalá que las empresas españolas se contagiaran de estos hábitos que van más allá de la responsabilidad social corporativa". Señala que en estos países hay una "concienciación ecológica altísima y una incidencia enorme en este tipo de prácticas, y esto va calando".  Según Lasalle, hay "un cambio de mentalidad dentro de un capitalismo que busca tener un propósito y un contenido ético"