Sare valora positivamente el paso de EH Bildu, "en la buena dirección"

San Sebastián

La red de apoyo a los presos de ETA Sare se ha pronunciado este martes sobre la declaración institucional emitida este lunes por EH Bildu en la que la coalición abertzale afirmó que "el dolor de las víctimas de ETA nunca debió haberse producido". Un paso "en favor de la convivencia" y "en la buena dirección" según Joseba Azkarraga, portavoz de Sare.

Azkarraga ha saludado el paso dado por EH Bildu y ha destacado la recepción mayoritariamente buena que ha tenido entre los principales actores de la política vasca. Sobre las críticas emitidas desde la derecha, Azkarraga las ha enmarcado dentro de un "debate político" que no es el ámbito de actuación de Sare, que es "el debate ético".

En ese sentido, la red de apoyo a los presos etarras ha reclamado este martes ante los medios de comunicación en el Boulevard donostiarra que se ponga fin a la política de excepción penitenciaria diez años después del fin de ETA. Un movimiento necesario "porque cada día que pasa son 24 horas más de vulneración de derechos de los presos" y que, a juicio de Sare, debería venir acompañado por el acercamiento de los reclusos etarras a las cárceles vascas. Y es que, según ha afirmado Joseba Azkarraga, "la práctica totalidad totalidad de los 104 presos que aún siguen fuera de Euskal Herria, a excepción de entre tres y cinco" han solicitado su traslado a los centros penitenciarios de Euskadi.

La red se ha mostrado confiada en que el Gobiern o vascon "no pondrá trabas" a las peticiones de los presos de ETA aunque han reconocido que antes de llegar al Ejecutivo autonómico las solicitudes pasarán por el Gobierno central. En cuanto a la progresión de grados, Azkarraga ha denunciado que más de un tercio de los presos de ETA —unos 70— deberían disfrutar del tercer grado y sólo lo hacen una decena, que el 90 % "tienen derecho" a permisos penitenciarios "y no está siendo así".

Este bloqueo, afirman desde Sare, se debe aque la Audiencia Nacional está "enmendando" las decisiones de las Juntas de Tratamiento sin tener "ni repajolera idea" sobre las circunstancias de los presos y, con ello, "bloquea cualquier avance".