El Toledo sigue sin levantar cabeza (0-1)

Toledo

El Toledo ha retornado al camino de las derrotas este domingo en casa frente a un Intercity muy práctico y con mucho oficio. Una semana más seguirá en puestos de descenso directo a Tercera División y con esa sensación de no haber dado aún el salto de nivel tras el ascenso de categoría. 

Como en muchos comienzos de partido las primeras llegadas a línea de fondo fueron del Toledo pero sin crear peligro real. Sí que fue peligroso el disparo muy lejano de Mamau que obligó a intervenir a Manu Herrera en el minuto 10'. Casi todo lo del Toledo en la primera parte fueron lanzamientos lejanos de Alberto, de Rodri... y algo más clara una de Dieguito desde la frontal, en el minuto 28', golpeando alto el balón por poco. 

Los alicantinos, en la primera parte, apenas crearon peligro con un contragolpe en el minuto 18'. En una llegada de Enzo el delantero chocó con Olmedo que siguió el partido dolorido y es que un rato antes fue atendido otra vez. 

La segunda parte no pudo empezar peor para el Toledo. A los 23 segundos de juego un centro desde la banda izquierda del Intercity fue rematado a la perfección por Enzo suponiendo el único gol del partido. Posteriormente, de falta, Pol Roigé mandó un balón al palo. 

Paulatinamente el Toledo iría intentando recomponerse. Lo intentó como viene haciéndolo: sin una claridad evidente en el juego, mediante chispazos de Rodri, de Migue... Precisamente el ex del Recreativo Granada protagonizó en el minuto 63' un centro chut que cogió la dirección del primer palo obligando de nuevo a intervenir a Herrera.  

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Posteriormente entraron al campo Rubén Moreno, Víctor Andrés... pero el Intercity siguió defendiendo con orden y una llamativa facilidad los numerosos centros laterales del Toledo y las ineficaces acciones que tenía a balón parado. Los visitantes aceptaron este tipo de partido y tuvieron contras para sentenciar con Enzo en el 75' y Ferroni en el 93' (paradón de Olmedo). En todo este tiempo el Toledo, además de lo mencionado, apenas dispuso de alguna situación de peligro real.

Con el pitido final una parte de la afición mostró su malestar con gritos de "fuera, fuera". La situación del entrenador, cuyo agente está desde principios de esta semana en contacto con el consejo de administración, sigue siendo delicada.