La ley Trans de La Rioja afectará al ambito sanitario, educativo y deportivo
La norma, que comienza de nuevo su tramitación parlamentaria, incluye la autodeterminación de género para los ambitos competenciales regionales
Manifestación del Orgull LGTB+ bajo el lema “Els drets trans són drets humans” en Valencia. / Biel Aliño (EFE)
Logroño
La Ley Trans de la rioja ya fue tomada en consideración el año pasado, pero no llegó a ser votada en firme. Ahora Partido Socialista, Podemos e Izquierda Unida vuelven a iniciar su tramitación, para dar cumplimiento a su acuerdo de gobierno.
A partir del jueves 1 de octurbe, 12 expertos (tres por cada grupo) comparecerán en sede parlamentaria para aportar su visión al texto legal, posteriormente se abrirá el turno de enmiendas. Así lo ha acordó este lunes la Comisión Parlamentaria de Participación, Cooperación y Derechos Humanos, que ha designó como su vicepresidente al diputado socialista Víctor Manuel Royo.
La Rioja es una de las cuatro comunidades que no tienen ninguna ley específica para el colectivo TRANS o LGTBI junto con Castilla y León, Castilla La Mancha y Asturias.
¿Qué dice la ley?
El punto principal es la autodeterminación de género. Es decir, cualquier persona mayor de 16 años podrá declararse hombre o mujer sin la necesidad de contar con un informe médico que acredite que esa persona sufre de disforia de género y sin tener que haber pasado por tratamiento hormonal durante dos años
¿Esto significa que es un cambio de sexo a todos los niveles?
No, para que se diese ese supuesto se debería modificar su condición en el registro civil. Un cambio que queda fuera de las competencias del gobierno de la rioja. Para realizar ese cambio, hay que ir a la normativa estatal, que es la ley que en estos momentos también está intentando aprobar el gobierno central.
Tampoco afectaría por tanto a políticas de igualdad, al ámbito judicial o a prisiones.
¿Donde sí que tendría efecto?
En las competencias autonómicas. Principalmente sanidad, educación y deporte.
En sanidad. La persona que haya cambiado de género será atendida en base a esa nueva situación. También se facilita el acceso a los menores a tratamientos hormonales, eso sí, con consentimiento familiar en caso de los menores de 16 años.
En el caso de educación, ese cambio permitiría ser llamado oficialmente por su nuevo nombre y utilizar los vestuarios correspondientes a su identidad de género.
Esto también ocurriría en deporte, donde una persona trans podría competir con un equipo de su nuevo género. Eso sí, en el deporte no profesional, ya que el profesional no es competencia del gobierno riojano.
