El turismo religioso está en auge: solo la Catedral de Pamplona atrajo a más de 100.000 visitantes en 2019
El Camino de Santiago atrae a Navarra a unos 60.000 peregrinos anuales, a los que hay que añadir las miles de personas que visitan iglesias, catedrales y monasterios
El turismo religioso está en auge: solo la Catedral de Pamplona atrajo a más de 100.000 visitantes en 2019 / Cadena SER
Pamplona
Este miércoles se ha inaugurado en la Catedral de Pamplona el XVI Congreso de Turismo religioso y sostenible.
El gestor general del Museo de la Catedral de Pamplona, Gonzalo García, ha explicado que los organizadores se han decantado por Pamplona "fundamentalmente porque les gustó la ciudad, por el patrimonio que tiene la ciudad y también porque la catedral se ha distinguido en los últimos años por realizar actividades inhabituales. Podemos decir que es la única catedral que socializa sus estancias e instalaciones para eventos, reuniones de empresa, etc.".
Turismo religioso
A pesar del impacto de la pandemia, que ha afectado en todos los niveles, puede decirse que el turismo religioso está en auge. Cerca de 60.000 personas acuden cada año a Navarra en su peregrinaje a Santiago de Compostela. A esta cifra hay que sumar todas aquellas personas que realizan otro tipo de rutas como el camino ignaciano o visitan las numerosas iglesias, monasterios y otras infraestructuras.
Solo en Pamplona, existe una ruta exclusiva de iglesias del Casco Antiguo. Solo la catedral ha registrado un incremento muy notable de visitantes -son datos previos a la pandemia-. García ha detallado que "en los diez últimos años hemos pasado en la catedral y el museo de tener 10.000 visitantes a cerrar 2019 con más de 100.000. Cada vez hay más tendencia a abrir las puertas de par en par. Aquí prácticamente se enseñan todas las estancias. Es la única catedral que hay en Europa que mantiene las antiguas estancias de los canónigos, cuando vivían aquí".
El consejero de Desarrollo Económico, Mikel Irujo, ha señalado que este tipo de turismo interesa porque "es un perfil de turismo responsable y sostenible en todos los sentidos. Medioambientalmente, pero también desde un punto de vista turístico porque no genera picos, y sí una infraestructura turística a su alrededor más permanente, más permeable".
