Andrés Goerlich: "Si no se dispararan mascletàs en la plaza del Ayuntamiento su reforma sería más ambiciosa"

Valencia

La descentralización de las mascletàs durante las pasadas Fallas de València ha gustado a la ciudadanía, aunque nadie quiere renunciar a los disparos en la plaza del Ayuntamiento de València, una circunstancia que hipoteca el futuro diseño definitivo de este espacio de la ciudad. Es lo que opina el abogado Andrés Goerlich, presidente de la Fundación Goerlich, que lamenta que el proceso participativo que se ha llevado a cabo haya sido poco publicitado y las preguntas dirigidas para obtener unas conclusiones concretas.

Goerlich reconoce que las mascletàs en la plaza del Ayuntamiento son una tradición valenciana, incluso opina que deberían mantenerse allí los disparos. Ahora bien, también considera que considera que esta decisión condiciona el diseño definitivo de lo que tiene que ser nuestra plaza mayor del siglo XXI. La que diseñó su tío abuelo, Javier Goerlich, en 1928 fue la plaza del siglo XX, aunque se mutiló en los años 60, quitando la plataforma elevada, la famosa tortada, y el mercado de flores.

Ahora hay otras necesidades y se avanza hacia la peatonalización de los centros de las ciudades. Si se mantienen las mascletàs el diseño tendrá que tener en cuenta que allí se reunirán a la vez miles de personas, pero si se trasladaran a otras zonas de la ciudad, la plaza del Ayuntamiento podría tener muchas más zonas verdes, arbolado, incluso se podría recuperar el canal que unía la Albufera con la calle de las Barcas a través de Russafa.

Andrés Goerlich confía en que el Ayuntamiento ponga en marcha un ambicioso concurso internacional de ideas y que se publicite más que el proceso participativo que ya se desarrolló, donde, según dice, muy pocos vecinos, comerciantes o falleros opinaron sobre cómo debe ser la plaza del Ayuntamiento del futuro.

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