El ocio nocturno amenaza con protestar con huelgas de hambre ante la situación de muerte del sector

A Coruña

Los hosteleros avanzan en una solución para volver a su actividad de forma total en septiembre ha habido nueva reunión del sector con la Xunta aún sin acuerdo pero con acercamiento de posturas, según su presidente Héctor Cañete. Más difícil lo tiene el ocio nocturno que sufre las consecuencias de los cierres continuos y da trabajo a unas cinco mil personas en Galicia. El Presidente de Galicia de Noite, Luís Diz, ha declarado en entrevista en Hoy por hoy A coruña que el sector está al borde de convocar movilizaciones y huelgas de hambre tras año y medio de paralización de actividad.

Insiste en que cuando llegan nuevas olas se restringue su funcionamiento sin que se haya demostrado que sus negocios son un foco prioritario en la expansión de la pandemia. Pide un plan de rescate que no llega.

Otro sector sin ayudas y con muchos problemas es el de las salas de conciertos que denuncian sentirse "abandonadas" por la Xunta por la falta de interlocución directa. Critican la decisión del gobierno autonómico de incluirlas en el apartado de ocio nocturno, sin tener en cuenta el componente cultural que, a través de la música, alberga el sector. Desde el inicio de la pandemia sólo han podido abrir dos meses.

Los empresarios de las salas privadas de concierto afirman estar al límite del límite, con sacrificios económicos y patrimoniales para poder sobrevivir. Demandan un nuevo modelo para seguir haciendo frente a la situación pero piden,fundamentalmente,a la Xunta que no meta al sector en el mismo paquete que el ocio nocturno porque, subrayan, no son hosteleros.

Una de las pocas salas de concierto que quedan en A Coruña, la Baba bar, ya no volverá a abrir. La asociación Clubcultura advierte que otras correrán la misma suerte si la administración no atiende urgentemente sus demandas.

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