Ribera y Bierzo pioneros en la certificación de sus vinos
Son las dos primeras denominaciones de origen que consiguen la Norma ISO 17065
RIBERA DEL DUERO
El Consejo Regulador Ribera del Duero dispone ya de la Norma ISO 17065, una acreditación que representa la máxima garantía para los consumidores y mejora sus condiciones para competir en los mercados nacionales e internacionales. Esta marca de calidad es junto con la del Bierzo la primera de Castilla y León en lograrlo, lo que les convierte en organismo certificador único para sus vinos.
La modificación de la Ley de la Viña y del Vino de Castilla y León por la Ley Agraria de Castilla y León, así como del Reglamento de las Denominaciones Geográficas de Calidad Alimentaria de Castilla y León, que entró en vigor en enero de 2019, han conformado el marco normativo de la Comunidad Autónoma en materia de calidad diferenciada, adaptada al marco legal de la Unión Europea.
Una de las cuestiones más determinantes de este nuevo marco normativo es la obligación de que las denominaciones de origen vínicas de Castilla y León se acrediten en la Norma UNE-EN-ISO 17065: Evaluación de la conformidad, requisitos para organismos que certifican productos, procesos y servicios.
La Norma ISO 17065 especifica los criterios generales que debe seguir un organismo de certificación de producto para que sea reconocido a nivel nacional, europeo e internacional, como competente, y se acredite la extrema rigurosidad de sus controles. Representa la máxima garantía para los consumidores y mejoran sus condiciones para competir en los mercados nacionales e internacionales.
Otras denominaciones de origen de la Comunidad, como Cigales y Toro, han obtenido ya la acreditación y en breve se procederá a la modificación de sus pliegos de condiciones para actuar como organismos de control en la norma 17.065. Rueda y León están a punto de obtenerla. Todas ellas seguirán el camino iniciado por Bierzo y Ribera del Duero para convertirse en sus organismos certificadores bajo la Norma ISO 17065.