La crisis de Pan Recor contada por sus trabajadores
En la última década esta histórica empresa cordobesa ha pasado de ser una panificadora puntera, saneada y competitiva a declararse en concurso de acreedores. Trabajadores y familiares nos cuentan cómo lo han vivido y cómo es su día a día después de casi un año sin cobrar
Córdoba
¿Cómo tiene que ser la situación para que unos trabajadores, en estos tiempos de crisis, estén pidiendo a su propia empresa que los despida para que puedan cobrar y para que una vez que estén en paro, puedan ser contratados por otra empresa? Esta es la triste realidad de los 42 trabajadores de Pan Recor, a los que algunos casos se les adeudan diez nóminas. "Lo único que queremos es el papel para quitarnos de allí, echar el paro y cobrar algo de dinero" reconoce Manuel, uno de los veteranos de la plantilla, al que, como al resto de sus compañeros, solo le han pagado una nómina en lo que va de año.
La histórica empresa cordobesa, fundada en 1976, se encuentra en concurso de acreedores desde el pasado mes de marzo. El segundo de su historia. Ya pasó por una situación similar en 2015 y logró superarlo.
Trabajando y sin cobrar
Pero esta vez el escenario parece más grave. Después de diez meses sin cobrar los ánimos están por los suelos. "Mi marido va a trabajar todos los días pero cuando acaba el mes no trae un sueldo a casa" nos cuenta la mujer de un trabajador. "Vivimos con el miedo de que nos corten la luz, de no poder pagar nuestra vivienda", añade. "Es difícil dar el paso de pedir ayuda, a la familia y a Cáritas, pero o lo haces o no comes", nos ha contado en Hoy por Hoy Córdoba.
Esta es una realidad que bien conoce Joaquín García, presidente del comité de empresa de Pan Recor, que recuerda que son "42 familias, con 42 historias diferentes, que estamos haciendo de tripas corazón, intentando apoyarnos los unos a los otros, pero se hace muy duro".
Crónica de una muerte anunciada
Pan Recor, crónica de una muerte anunciada. Los trabajadores nos cuentan cómo soportan un año sin cobrar
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García recuerda con nostalgia aquellos años 90 en los que Pan Recor era una empresa "punterísima" que llegó a contar con una plantilla de 140 trabajadores, "todos bien pagados, con una producción brutal". ¿Cómo se ha llegado a la situación en la que ahora se encuentran? La respuesta no es fácil: "El negocio ha ido flojeando poco a poco. Ha sido la crónica de una muerte anunciada", nos dice. Y nada parece haber funcionado para evitar el abismo en el que se encuentra la panificadora después de una última década en la que como recuerda el presidente de Comité, "hemos aceptado reducciones de jornada, de plantilla y de sueldo". Un esfuerzo que ha recaído sobre la plantilla y que en su opinión "no solo no ha servido para mejorar la situación sino que la deuda se ha ido incrementando".
La situación de Pan Recor es tan grave, y la de lo que queda de su plantilla tan desesperada, que todos confían en que "la empresa acepte el ERE solicitado por el comité a la espera de que se resuelva el concurso de acreedores al que se ha llegado a petición de los propios trabajadores", como ha explicado Antonio Lopera, secretario de Acción Sindical de UGT. Para este veterano sindicalista no hay duda: "La empresa es la culpable de esta situación. Ahora el ERE es la mejor solución". La única, al menos, que acabaría con la agonía de más de diez meses sin cobrar.