Jubilación

Córdoba

Antiguamente jubilarse era sinónimo de esperar una muerte cercana, mientras que ahora nos llega en plenitud física y mental, con excepciones por supuesto. Existen y asi lo demuestran un gran número de escritores, filósofos, científicos, pintores, etc., que crearon sus grandes obras en plena jubilación.

Durante este jubileo se puede elegir que hacer, donde trabajar, donde emplear las energías ,sin sentir el encorsetamiento de horarios inflexibles, ausencia de tiempo para actividades y aficciones. Es una etapa nueva, donde no tienes que viajar, solamente en agosto, puedes disfrutar de la familia sin recortes y también de los amigos, haciendo tertulias interesantes y largas, escuchar música y sobre todo leer, devorando todo lo que caiga en nuestras manos.

El día de mi jubilación se grabó en mi alma y en mi piel intensamente. Hice un memorándum de mi trabajo, de mis dificultades, de las malas experiencias, como la pérdida de tantas vidas de pacientes que he conocido, enfermedades que han castigado a muchos sin esperarlas, invalidez para otros que hasta entonces disfrutaban de buena salud. Yo quise compartir su dolor y aliviar su sufrimiento, de una forma cercana, y he sentidos sus abrazos y sus emociones, sin acabar de entender, como ellos, el porqué de estos sinsabores.

En fin, una puerta se cierra y otra se abre, para mí, es la AECC, donde pienso seguir con un enriquecimiento personal, sirviendo a los pacientes con cáncer y sus familiares, intentando aliviar su sufrimiento y ofreciendo servicios que ayuden a mejorar su calidad de vida y su bienestar, en la medida en que se pueda.