Sociedad | Actualidad

Los forenses explican que el asesino de Heidi sabía seccionar y quitó piel del vientre para ocultar algo

La Audiencia Provincial de Madrid celebra este lunes la undécima sesión del juicio con jurado con los testimonios de forenses

César Román, el Rey del Cachopo, en el juicio contra él. / Europa Press

César Román, el Rey del Cachopo, en el juicio contra él.

Madrid

Dos forenses que practicaron la autopsia al tronco atribuido a Heidi Paz, por cuya muerte se juzga a César Román, el Rey del Cachopo, han explicado que no pudieron determinar la raza del cadáver, y que la persona que lo seccionó sabía cómo hacerlo y quitó un trozo de piel para ocultar algo, posiblemente la identificación.

La Audiencia Provincial de Madrid celebra este lunes la undécima sesión del juicio con jurado con los testimonios de forenses, expertos en Toxicología, psicólogos y policías. Los primeros en comparecer han sido los dos forenses que practicaron la autopsia al tronco encontrado el 13 de agosto de 2018 en una nave de Madrid, uno de los cuales acudió además al lugar, que han sido preguntados fundamentalmente sobre la causa de la muerte, la raza del cadáver y si ese tenía marcas de cesárea, ya que son puntos de controversia en el juicio.

El procesado mantiene que el cadáver puede no ser de Heidi Paz porque inicialmente la Policía dijo que era de una mujer caucásica que no había tenido hijos, mientras que Heidi era mulata y tenía dos hijos, al menos uno de ellos por cesárea.

Estos dos forenses han explicado cómo encontraron el tronco parcialmente sumergido en un líquido que era una mezcla de fluidos corporales y de sosa cáustica, sin cabeza ni extremidades, que habían sido seccionados "limpiamente" y tras el fallecimiento.

Eran cortes "absolutamente regulares" y bien delimitados en las articulaciones, lo que "exige en conocimiento", según los forenses, que han detallado que esas secciones debieron ser hechas con un cuchillo de hoja larga, no como los que les han mostrado en la sala que se hallaron en la nave y en un restaurante de César Román.

Sobre si el cuerpo presentaba alguna marca de cesárea, los forenses han explicado que en la zona del vientre la piel estaba muy alterada, con grandes cambios de coloración, y no vieron cicatriz de cesárea pero sí que faltaba piel en esa zona, lo que les hizo pensar "que era un corte hecho para quitar algo identificativo". No pudieron determinar si el cuerpo era de una persona que había dado a luz dado su estado.

En cuanto a la raza, estos dos expertos han incidido en que, dado el estado del cuerpo, no pudieron determinarla, ya que para ello necesitarían tener todo el cuerpo y otros datos antropológicos, y por eso se limitaron a reseñar que el tronco de era de una persona "de piel blanca-morena".

Los forenses han incidido en que, dato el estado "muy deteriorado" del cadáver y que no tenía cabeza ni extremidades, ellos no pudieron determinar la causa de la muerte, ni la fecha exacta de la misma. Han relatado que el tronco presentaba dos partes claramente diferenciadas: la parte superior y la inferior, ya que la primera estaba menos afectada por el producto corrosivo y tenía un tono más pálido, mientras que la de abajo tenía tonos más oscuros.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00