El artista de la falla municipal de 2020, molesto con el Ayuntamiento de València
Asegura que plantar la cabeza de la meditadora no es plantar una falla municipal
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Cremà de una parte de la falla municipal de Escif el pasado 17 de marzo de 2020 / José Bravo
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Valencia
Escif, el artista que firma el proyecto de la falla municipal que no se pudo plantar en condiciones en 2020, ha asegurado que lo que plantará el Ayuntamiento de València en septiembre no será una falla, que lo que se quemará el domingo 5 no es el proyecto que presentó hace dos años, no es la meditadora, sino un "recuerdo simbólico de una falla".
El artista, en un comunicado afirma estar "sorprendido" por que el Consistorio anunciase esta semana que quemará la meditadora este mes de septiembre. Sorprendido, afirma, porque los restos de la meditadora se presenta como Falla Municipal, cuando a su juicio no lo es. Según Escif, "la meditadora no pudo terminar de montarse. Se quedó a medias. Cuerpo y mente quedaron separadas".
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Escif insiste: La cabeza y los hombros no son la meditadora. "Son las ruinas de un proyecto, las brasas que resistieron, el recuerdo de lo acontecido", afirma. El artista acaba afirmando que la meditadora abandonó su cuerpo el día que éste fue incinerado. Se quemó el 17 de marzo de 2020 de madrugada.
Por último, el artista lamenta haberse enterado por la prensa de la noticia y recuerda que los restos del monumento, la cabeza y los hombros, "quedaron atrapados en el puerto, abandonados al devenir de una realidad completamente imprevisible".
Respuesta de la concejalía de Cultura Festiva
Desde la concejalía de cultura festiva responden que coinciden plenamente en que la situación excepcional que llevamos viviendo desde marzo del año pasado ha supuesto un auténtico varapalo para las Fallas, tal y como las hemos conocido y vivido siempre. Pero es la realidad que como sociedad y como fiesta nos toca afrontar. Recuerdan además que nadie podía imaginar hace ya dos años que el inicio de los proyectos de fallas para 2020 seguirían sin ser plantados y quemados en condiciones dos años después. Pero es la realidad que como sociedad y como fiesta hemos tenido que afrontar.
Insisten desde la concejalía que ni la falla de la plaza del Ayuntamiento ni la mayoría de las que se planten y quemen en septiembre serán como se concibieron inicialmente en 2019. Serán unas fallas totalmente excepcionales. En el caso del Ayuntamiento, tras la "cremà" el año pasado de parte de la estructura principal, en septiembre se plantará el proyecto presentado hace unos meses por Manolo Martín, José Ramón Espuig i ESCIF, un proyecto alternativo a la falla de la meditadora que fue aceptado y presupuestado en 67.000 euros, más IVA, para retocar y reformular, como han tenido que hacer muchas comisiones falleras de la ciudad, el proyecto inicial de cara a un edición de las "Fallas", que esperan que sean las últimas antes de poder celebrar en marzo una edición mucho más normalizada y sin la excepcionalidad derivada de la pandemia por la COVID-19.