Calidad democrática

Valencia

Esta semana hemos vivido el adiós a sus cargos de la hasta ahora líder del PP, Isabel Bonig. Bonig ha sido sincera en su despedida, sin aspavientos, con honestidad. Y ha hecho más. Ha hecho público algo que la ciudadanía necesitamos saber: que es posible la relación personal a pesar de las discrepancias políticas.

A Bonig le hemos visto emocionarse al despedirse de Fran Ferri, de Compromís, y de Manolo Mata, del PSPV, con quienes ha mantenido pulsos dialécticos y tensiones estos últimos años, lógicas por sus diferencias políticas. Reconforta saber que a pesar de esa distancia que a veces parece insalvable, se pueden encontrar espacios y planos de acuerdo y coincidencia. En este tiempo de bandos, de polarización, esa actitud nos hace más falta que nunca. Seguro que eso ayuda a avanzar. Eso es calidad humana. Y calidad democrática.