Critican que Dénia gaste más de 100.000 euros para duplicar cámaras de vigilancia en la residencia de ancianos
Desde el SEP-CV denuncian esta inversión del Ayuntamiento, mientras las instalaciones "siguen ruinosas"
Dénia
El Sindicato de Empleados Públicos de la Comunidad Valenciana (SEP-CV) denuncia que el Ayuntamiento de Dénia ha gastado unos 115.000 euros en un contrato para instalar 26 cámaras de video vigilancia más en la Residencia de Ancianos Santa Lucía, entre otras dependencias.
Desde esta sección sindical se explica que este centro de la tercera edad ya contaba con una instalación de más de 20 cámaras, perfectamente operativas y en funcionamiento de un contrato anterior, que convivirán ahora con las nuevas. De hecho, apuntan, ante la falta de localizaciones donde colocar más cámaras, la mayoría se han instalado junto a las que ya había, duplicándolas y enfocando al mismo punto.
Desde el SEP-CV entienden que se trata de un derroche de dinero público totalmente innecesario e inoperativo que no aporta nada al centro. Además, el superávit de cámaras ha supuesto que se lleguen a instalar cámaras enfocando a puntos como los accesos a los WC, donde algunos residentes con deterioro cognitivo no siempre cierran la puerta.
Desde el SEP explican que el contrato contempla también la instalación de 8 cámaras en el mercado municipal y 10 en el parque de Torrecremada, que tienen más de 15.000 metros cuadrados, pero el grueso del contrato será para instalar cámaras en la Residencia. De este modo, Santa Lucía contará con más cámaras de videovigilancia que el resto de todas las dependencias municipales juntas. Con las más de 50 cámaras en funcionamiento, la residencia "dispondrá del doble de cámaras que la primera edición del programa televisivo Gran Hermano". Y añaden que el contrato no contempla la instalación de cámaras en el resto de dependencias municipales como Servicios Centrales, Servicios Sociales, Urbanismo o Policía Local.
Asimismo, continúan señalando que el moderno sistema instalado permite, por ejemplo, la "posibilidad de que la directora de Santa Lucía acceda al visionado de las cámaras las 24 horas del día, desde cualquier lugar con un teléfono móvil, la única trabajadora del centro con el teletrabajo aprobado".
Desde el SEP-CV se denuncia que mientras se realiza esta cuantiosa inversión en la residencia, "el resto del edificio continúa en un estado ruinoso".
Entre otros ejemplos, señalan que las habitaciones de la primera planta siguen sin un contar con aseo o ducha individual y no hay proyecto a la vista para resolver esta carencia; hay numerosas goteras; el sistema de calefacción está obsoleto, dejando a los residentes muchos días sin agua caliente, y el estado de puertas, paredes e instalación eléctrica es lamentable. De hecho, en la imagen adjunta de la entrada a los WC se aprecia que algunos inodoros carecen de tapa, que tendría un coste menor a los cien mil euros de las cámaras.
El sindicato también explica que para realizar esta instalación tan “urgente y necesaria”, los técnicos encargados han podido campar a sus anchas por el centro, mientras que hace más de 4 meses que no se permite la entrada a los servicios de peluquería o podología de los residentes, por motivos COVID.
Por último, recuerdan que en la pasada huelga de enfermeras del mes de diciembre se acordó que, para desconvocarla, entre otros puntos se realizaría una auditoría de inversiones, todavía pendiente, llevada a cabo por técnicos especializados en dependencia, geriatría y sanidad. El objetivo de esta iniciativa es priorizar y planificar qué inversiones son más necesarias en el centro, para evitar que sean organizadas por gestores sin enfoque sanitario o de cuidados que desconocen las necesidades reales del centro.